¡Nostalgia de los arcángeles! Yo era... Miradme. Vestido como en el mundo, ya no se me ven las alas.

Seriamente, en tus ojos era la mar… temerosos de lazos y palabras dura… Dos niños de la noche, terribles,… cuya infancia era un robo de barco… Duérmete. Ciérralos.

Dentro del pecho se abren corredores anchos, largos, que sorben todas las mares. Vidrieras, que alumbran todas las calles.

Perdido está el andaluz del otro lado del río. —Río, tú que lo conoces: ¿quién es y por qué se vino? Vería los olivares

A ti, contorno de la gracia humana… recta, curva, bailable geometría, delirante en la luz, caligrafía que diluye la niebla más liviana. A ti, sumisa cuanto más tirana

¡No pruebes tú los licores! ¡Tú no bebas! ¡Marineros, bebedores, los de las obras del puerto, que él no beba!

La primavera ha venido dejando en el olivar un libro en cada nido. Vivir leyendo, leyendo mientras la paz en el mundo

Te conocí de niño allá en el campo aquel de Córdoba… jugando entre los álamos y los mai… las vacas de las viejas quintas, l… No te vi más hasta que supe un día

Fue cuando la flor del vino se mor… y dijeron que el mar la salvaría d… Aquel día bajé a tientas a tu alma… y comprobé que un alma oculta frío… y que más de una ventana puede abr…

Hombres de mar, eterno buscador que nunca encuentr… en el horizonte azulado del cielo… eternas despedidas, regresar quizá… partes siempre mirando el horizont…

¡Traje mío, traje mío, nunca te podré vestir, que al mar no me dejan ir! ¡Nunca me verás, ciudad, con mi traje marinero;

Toma y toma la llave de Roma, porque en Roma hay una calle, en la calle hay una casa, en la casa hay una alcoba, en la alcoba hay una cama,

Nadie sabe Geografía mejor que la hermana mía. —La anguila azul del canal enlaza las dos bahías. —Dime:¿dónde está el volcán