A ti, divina, corporal, preciosa,
por quien el aura impereceptible orea
el suspendido seno de recrea
la prefección tranquila de la rosa.
.
.A ti, huidiza, resvalada, airosa,
caricia virginal, sal que aletea
y ante la mano en vuelo delinea
tu fugitiva, rubia espalda, diosa.
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.A ti, fino relámpago, destello,
sonrisa más delgada que el cabello,
burladora, inefable travesura.
.
.La gracia de tu gracia es resistirte,
correr, volar, asirte, desasirte.
A ti, yo no sé qué de la Pintura.