Francisco de Quevedo

Un delito igual se reputa desigual si son diferentes los sujetos que le cometen, y aun los delitos, desiguales

Si de un delito proprio es precio en Lido
la horca, y en Menandro la diadema,
¿quién pretendes, ¡oh Júpiter!, que tema
el rayo a las maldades prometido?
 
Cuando fueras un robre endurecido,
y no del cielo majestad suprema,
gritaras, tronco, a la injusticia extrema,
y, dios de mármol, dieras un gemido.
 
Sacrilegios pequeños se castigan;
los grandes en los triunfos se coronan,
y tienen por blasón que se los digan.
 
Lido robó una choza, y le aprisionan;
Menandro un reino, y su maldad obligan
con nuevas dignidades que le abonan.

#EscritoresEspañoles #Soneto (1648), ABBA ABBA CDC DCD El Parnaso español

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