#EscritoresEspañoles #Nana
El reino mineral, vítreo, derrama su doblado país, cúbico apenas, y eslabonando peces y, azucenas boga el reloj, el pétalo y la esca… La luna, deshojándose, embalsama
Madre, una estrella se ahoga entre las aguas del río. Va blanca de luz de luna llena de miedo y de frío.
Fernando murió muy lejos del Guadalquivir natal, río de taurinos peces que, en garrochas de cristal, dando el salto del trascuerdo,
ASTURIAS. Mi adolescencia. Ha… que estaba cargando sidra, fletado… yo soñaba con mi novia, la hija de… mi novia, flor de los trópicos, lu… Sonaba un dejo de gaita y un redob…
—Cuidado, Doña Perfecta, —dijo a la rosa el biciclo—. ¿Por qué me sales al paso? Si no te apartas, te piso.... —Pasa ya, tonto de acero;
No la ha visto nadie, ni siquiera el aire, pajarito sabio que todo lo sabe. Volando, piando, se perdió una tar… que también a Roma se va por el ai…
El canario y el limón son dos hermanos mellizos. ¡Cuánto amarillo en las plumas y en los gajos amarillos! Canario, limón que canta
—Cuidado, Doña Perfecta, —dijo a la rosa el biciclo—. ¿Por qué me sales al paso? Si no te apartas te piso... —Pasa ya, tonto de acero;
A Rafael Consinos-Assens, gran M… Luces. Rosas de luces que se encienden en explosiones silenciosas hasta irrumpir en las retinas
A orillas de la fábula, secretamen… desde el árbol de sangre donde nac… que se asoma a tu pulso, tu lengua… era un sésamo oculto para el paisa… de tu floral desnudo, desgajado en…
“¡Dios me otorgue el merecerle, Oh Virgen de la Merced! Dándome postrera suerte Para que sacies mi sed En la hora de mi muerte.”
Otoño, viento amarillo... vientecillo trotador que e campo como a un asnillo, carga de odres de olor... otoño, viento amarillo...
Nápoles apareja sus jardines y ofrece al pez, virgíneas, sus co… sus anclas de azahar, sus amapolas… su pulso en flor, su anzuelo, a lo… Toman baños de sol los bergantines…
Rehoga el mar con sal napolitana sus algas, a la luz de las farolas… Flores de plato a plato, barcarola… tenores entre el queso y la manzan… La lumbre, en los peroles, vesubia…