Doblo la página del día, escribo lo que me dicta el movimiento de tus pestañas. Mis manos abren las cortinas de tu ser

El mar, el mar y tú, plural espejo… el mar de torso perezoso y lento nadando por el mar, del mar sedien… el mar que muere y nace en un refl… El mar y tú, su mar, el mar espejo…

El nombre Sus sombras El hombre La hembra El mazo El… La i…

Hora nula, cisterna donde mi pensamiento a sí mismo se bebe. Por un instante inmenso he olvidado mi nombre.

ELLA cierra los ojos y en su ade… está desnuda y niña al pie del árb… Reposan a su sombra el tigre, el t… Tres corderos de bruma le da al ti… tres palomas al toro, sangre y plu…

La luz sostiene –ingrávidos, reale… el cerro blanco y las encinas negr… el sendero que avanza, el árbol que se queda; la luz naciente busca su camino,

EL salto de la ola más blanca cada hora más verde cada día

Deja que una vez más te nombre, ti… Mi tacto se prolonga en el tuyo sediento, largo, vibrante río que no termina nunca,

Coronado de sí el día extiende sus… ¡Alto grito amarillo, caliente surtidor en el centro de… imparcial y benéfico! Las apariencias son hermosas en es…

Casas que van y vienen por mi fren… semillas enterradas que maduran bajo mis párpados, casas ya vuelta… un puñado de anécdotas y fotos, fugaces construcciones de reflejos

Rodeado de noche follaje inmenso de rumores grandes cortinas impalpables hálitos escribo me detengo

Dame, llama invisible, espada fría… tu persistente cólera, para acabar con todo, oh mundo seco, oh mundo desangrado,

Devora el sol restos ya inciertos; el cielo roto, hendido, es una fos… la luz se atarda en la pared ruino… polvo y salitre soplan sus desiert… Se yerguen más los fresnos, más de…

Contra la noche sin cuerpo se desgarra y se abraza la pena sola Negro pensar y encendida semilla Pena de fuego amargo y agua dulce

Sobre las aguas, sobre el desierto de las horas pobladas sólo por el sol sin nombr… van los maderos tristes, van los hierros, la sal y los carb…