Los versos del Capitán
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No eras para mis sueños, ni eras p… ni para mis cansancios aromados de… ni para la impotencia de mi rabia… no eras la bella y buena, la bella… No eras para mis sueños, no eras p…
Amor, ahora nos vamos a la casa donde la enredadera sube por las e… antes que llegues tú llegó a tu do… el verano desnudo con pies de madr… Nuestros besos errantes recorriero…
Vienes de la pobreza de las casas… de las regiones duras con frío y t… que cuando hasta sus dioses rodaro… nos dieron la lección de la vida e… Eres un caballito de greda negra,…
La gran lluvia del sur cae sobre… como una sola gota transparente y… el mar abre sus hojas frías y la r… la tierra aprende el húmedo destin… lAlma mía, dame en tus besos el ag…
América, de un grano de maíz te elevaste hasta llenar de tierras espaciosas el espumoso
Se van rompiendo cosas en la casa como empujadas por un invisible quebrador voluntario: no son las manos mías,
Amor mío, el invierno regresa a su… establece la tierra sus dones amar… y pasamos la mano sobre un país re… sobre la cabellera de la geografía… Irnos! Hoy! Adelante, ruedas, nav…
Ay sí, recuerdo, ay tus ojos cerrados como llenos por dentro de luz negr… todo tu cuerpo como una mano abier… como un racimo blanco de la luna,
Oh Cruz del Sur, oh trébol de fós… con cuatro besos hoy penetró tu he… y atravesó la sombra y mi sombrero… la luna iba redonda por el frío. Entonces con mi amor, con mi amada…
Si tu pie se desvía de nuevo, será cortado. Si tu mano te lleva a otro camino se caerá podrida.
En plena guerra te llevó la vida a ser el amor del soldado. Con tu pobre vestido de seda, tus uñas de piedra falsa te tocó caminar por el fuego.
Ebrio de trementina y largos besos… estival, el velero de las rosas di… torcido hacia la muerte del delgad… cimentado en el sólido frenesí mar… Pálido y amarrado a mi agua devora…
La niña de madera no llegó caminan… allí de pronto estuvo sentada en l… viejas flores del mar cubrían su c… su mirada tenía tristeza de raíces… Allí quedó mirando nuestras vidas…
Cuando a regiones, cuando a sacrif… manchas moradas como lluvias caen, el vino abre las puertas con asomb… y en el refugio de los meses vuela su cuerpo de empapadas alas rojas.
Alta sobre la tierra te pusieron, dura, hermosa araucaria de los australes montes,