Ni como tú. Ni como yo. Si es necesario para vivir que muera todo. La Poesía

Es otra vez de noche y en general la casa duerme. Una voz en la radio dice últimas palabras.

Dejar olvidar de a poco el que soy. Hundirme lentamente en las horas de la noche

Piel abrochada a mi garganta piel de pieles. el hombre que buscaba no existe ni siquiera en mí. Retrocedo todo

Vuelvo de los espacios donde temía que su cuerpo dañara mi cuerpo. Albatro muerto albatro despedazado

Hoy los vi eran una pareja por la vida encorvados cada uno hundiéndose a pique

Nací en un barrio. «Crecí en sus veredas un día alcé vuelo soñando triunfar». Hoy no puedo volver

Hoy como nunca amé mi cuerpo en soledad. Hoy como ayer fui el amante infernal. Hoy no llegué muy lejos.

Verdad hiriente la verdad de unos labios enamorados. Allí donde la noche desanima a los pequeños pobres taciturnos

Dejo de latir dejo de ser el pulso donde antaño vibrara el Universo. Delicadamente me entrego a las argucias del amor

Ella tiene la amplitud de los mist… Todo vibra y todo enmudece en ella siempre al compás sonoro de su cue… Nunca ningún mortal amó esa libert… Alma y fuego y delirios todo el ti…

Balbucear cuando ya no queda otro camino balbucear aunque poco de a poco ir diciendo.

Búhos de la locura amaron mi carne hasta el extravío amaron mi dolor hasta los límites de la carne. ¿Mi escritura es un mandato social

El amor. El Amor. ¿Dónde estará el amor? Cuántas veces dibujé la esquina donde nunca llegaste

Las caderas estallaban una contra otra y al final fue el silencio. Después