A mí la poesía me lo permite todo y yo hago con ella lo que quiero. A veces me dejo llevar y Ella me envuelve en su torbellino palabra contra palabra

Vi cómo los perfiles del tiempo se posaban levemente en mi piel dejando una marca.

Días para recordar todo lo que no se pudo. Esos días que los muertos vienen en tropel a preguntar

Nos anunciaron que después de la muerte llegarán para. habitar nuestra propia casa los monstruos.

Atado por mis vicios a sórdidas cadenas me oculto para no ser el vuelo de los pájaros. Del brazo de la muerte

Cuando fue necesario crecer y disciplinarse crecí y me puse la nostalgia en la mirada. La disciplina viene sola.

La Cultura debe ser destruida en su totalidad. Hundir entre sus carnes amadas

Guitarras rasgadas con odio. Balas disparadas con odio. Tambores de locura. Rauda armonía de la muerte estás aquí

Hoy los vi eran una pareja por la vida encorvados cada uno hundiéndose a pique

Soy un hombre moderno. Atado de pies y manos decido el vu… Al principio me arrastraré y con el tiempo podré levantar un poco la cabeza.

Monté un caballo de carrera y comencé a galopar. Cuando el pobre caballo cayó muert… tracé una línea en la tierra y dij… Hasta aquí llegó el hombre

Partí de Buenos Aires a caballo de las palabras donde la poesía construyó su residencia. Mil días y mil noches

Reina pequeña Buenos Aires. Hoy te sentaré a mi lado y haremos juntos el viaje de un poema.

A pleno silencio es cuando escribo los vesos más hermosos. Hoy hubiese querido abrazar a mi p… y no fue posible. Mis hijos tironeaban de mí

Él era mi padre y caminaba siempre unos pasos delante de todas las mujeres. Yo era su hijo y lo reconocía siempre