Miguel Peñafiel

ERA UNA FLOR Y SE LLAMABA LORENA

Era una flor y se llamaba Lorena

Era una flor y se llamaba Lorena.
Muy bella de extramada constancia,
Su hermosura rondaba su rostro
Mientras su belleza me acechaba.
Decía la quería, y cuanto la amaba
Pero el amor corresponde a la muerte,
Murió el amor y lejos la historia
Y deje el amor al tiempo y la suerte.
 
Un amanecer me dijo con la voz
Al pensamiento:
 
Entonces que haces viéndola
Debes fijarte en otra.

Reserva derecho de autor.

Otras obras de Miguel Peñafiel...



Arriba