#Cubanos #Habaneros #Modernismo #SigloXIX #1891 #VersosSencillos
¿Por qué no acaba todo, ora que pu… Amortajar mi cuerpo venturoso Con tu mantilla, pálida andaluza? No me avergüenzo, no, de que me en… Clavado el corazón con tu peineta!
Como un ave que cruza el aire clar… Siento hacia mí venir tu pensamien… Y acá en mi corazón hacer su nido. Abrese el alma en flor; tiemblan s… Como los labios frescos de un manc…
En un dulce estupor soñando estaba Con las bellezas de la tierra mía: Fuera, el invierno lívido gemía, Y en mi cuarto sin luz el sol bril… La sombra sobre mí centelleaba
Deja ¡oh mi esposo! la labor causa… Que tus hermosas fuerzas aniquila. Y ven bajo la bóveda tranquila De nuestro lecho azul, con tu ador… Y alcé los ojos de mi libro, y vil…
¡Tú flotas sobre todo, Hijo del alma! De la revuelta noche Las oleadas, En mi seno desnudo
Vino el amor mental: ese enfermizo Febril, informe, falso amor primer… ¡Ansia de amar que se consagra a u… Como, si a tiempo pasa, al bravo a… Vino el amor social: ese alevoso
Sueño con claustros de mármol Donde en silencio divino Los héroes, de pie, reposan: ¡De noche, a la luz del alma, Hablo con ellos: de noche!
Pinta mi amigo el pintor Sus angelones dorados, En nubes arrodillados, Con soles alrededor. Pínteme con sus pinceles
Yo pienso, cuando me alegro Como un escolar sencillo, En el canario amarillo,— ¡Que tiene el ojo tan negro! Yo quiero, cuando me muera
Hay sol bueno y mar de espumas, Y arena fina, y Pilar Quiere salir a estrenar Su sombrerito de pluma. —“Vaya la niña divina!”
Ahora hay en los Estados Unidos un juego muy curioso, que llaman el juego del burro. En verano, cuando se oyen muchas carcajadas en una casa, es que están jugando al burro. No lo juegan...
El palacio está de luto Y en el trono llora el rey, Y la reina está llorando Donde no la puedan ver: En pañuelos de holán fino
Vedle! En la seca garganta Apagada está la nota: El brazo ya no levanta La copa de oro, que rota Por la mística muerte,
Era sol: caballero en un potro, Con la rienda tendida al acaso, Fui testigo de un drama de amores:… ¡Qué volar! ¡Qué caer! ¡Qué dolor… Aprieto el paso...
Oh, qué vergüenza! El Sol ha ilum… La Tierra; el amplio mar en sus e… Nuevas columnas a sus naves rojas Ha levantado; el monte, granos nue… Juntó en el curso del solemne día