Dije las mágicas palabras “Hokus, pokus” y tus labios se llenaron
La calma se posa en las piedras serenas. ellas no tienen esperanzas ni angustioso devenir.
Acude a tu soledad crea y ama porque amo a quien crea su propio destino y perece por ello.
He adornado un pequeño altar. Allí arden viejas hojas de laurel aromatizando el ambiente
Soy amiga de la vida revolotean burbujas de jabón y mágicas mariposas por mi avenida.
En la soledad de la montaña entre duras peñas alumbré mi cría y la llamé Esperanza.
Servir, es una buena forma de hacer amigos.
Movía su rueca mágica mientras cantaba himnos angelicales.
Dá, sin esperar nada a cambio. Ésa es la felicidad plena.
La estrella de duro diamante duerme sobre la pizarra negra del firmamento.
He coronado vuestra cabeza con tallos de verde y fresca hiedra.
He atesorado su mirada en el espejo de las siete lunas y sus ojos me hablaron.
!! Escuche a los sabios!!
Mar chileno amigo de la cordillera, cuyas aguas bajan en verdes venas hasta mezclarse
Acumular sabiduría y no compartirla es ir contra la esencia de la vida.