Andrés

Con tanto que contarte

El tiempo corre como si quisiera huir, como si hubiese algo más que lo acosara, ya tan acostumbrados a vivir que creemos que la muerte jamás nos verá la cara.
Entre tanto yo dibujo pensamientos, de cómo sería todo si tú estuvieras aquí, de si el presente fuese un poco menos tenso o si la vida a futuro no pareciera tan gris.
Hay heridas que no cierran tan deprisa, hay muchas otras que no están, pero aún se sienten, cómo cuando sientes el correr de la brisa, a pesar de escuchar como se aleja de ti... Pero ya he divagado en estos callejones, de dar vueltas al alma para evadir el dolor, y de plasmar mis sentimientos en renglones para ver si al fin desdoblo mi alma de tu corazón.
Más el destino es caprichoso y en su marcha, me invita a creer que algún día verás mis cartas, y entenderás que en esta vida todo pasa, más hay cosas por dentro que se niegan a morir.
Eso me pasa cuando te veo en tus fotos, sonriendo como el día en el que te volví a ver, tú mirada brillando como siempre y mi corazón sabiendo que no sonríes por el, y hay tanto que contarte que no se empezar, porque ... ¿como se empieza una historia por el final? ... Pues a pesar de que tú no me lo preguntas desde que tú te alejaste vino a mi la tempestad.
Fué el destino haciéndome justicia, por haber lastimado tu bonito corazón, por no saber amarte y por regar tu llanto, he derramado el mío en más de alguna ocasión... Fui tan cobarde para no pedir perdón, y a la vez tan valiente que aún peleó con tu recuerdo, más para ser sincero, corazón, aprovecho la ocasión pa decir que voy perdiendo. Y en ese lado oscuro de mi vida, donde habitan los sueños que rastrillan mi quebranto, entre lo más profundo de esa herida, se esconden tus miradas y las hojas de mi llanto.
Ojalá... Algún día leyeras esto
Y sepas que me alegra verte siendo tan feliz, supongo que al final amar es esto... Aprender a vivir abriendo cada cicatriz...

Otras obras de Andrés...



Arriba