Me gustan los pájaros blancos Me gusta el azúcar la nieve Y la sal de la vida. Me gustan Las noches blancas y la blancura De la luna. Me gusta la leche

Sonríe Dios en la pantalla Del cielo. Veo su semblante Hecho de rayas y puntos Luminosos. Pero no estoy seguro Si es el suyo o es el mío

Canto la belleza de mi cafetera us… Verdadera clepsidra En la que mi tiempo se acaba Gracias a ella aprendí La amargura y el azúcar de la vida

La luz que solamente es luz Cuando ilumina una cosa No es luz verdadera. La luz Que pasa velozmente y no deja somb… Que todo lo sostiene y lo anima

¿Conoces tu cuerpo esfera… esfera de la noche Huracán solar conoces tu cu… Conoces tu cuerpo conoces Tu admirable cabeza tus piernas mo…

Todo el mundo se reproduce y perec… Encima de una cama. Yo vivo feliz Rodeado de cucarachas y de espuma Debajo de la cama

En el sombrero de fieltro de Beuy… Hay un conejo asustado Que se llama vida Hay una flor de margarina Dos o tres gotas de sangre humana

Quién sabe en qué brazo divino, al… La oscura vivienda terrestre repos… Cuando sobre la nieve de casas dor… El mágico gallo su alba sostiene,… Dorado que asoma en la noche. Ser…

Lo que quiero decir Es que no tengo nada que decir Que todo lo que digo Lo digo solamente Solamente lo digo

Respira Tàpies Tras el muro No hay cemento puro Ni caja de cartón que encierre Su mirada. No hay ventana abierta

Toda máquina es inútil De nada sirve multiplicar La mirada o retardar La velocidad del dolor Desde hace millones de años

Sé perfectamente que mi casa Es una estrella Que se llama vida Y que esa estrella es la tierra Y que después tendre otra casa

Caminando por las calles de Milán Se ven sólo animales Bien vestidos. Ellas parecen fais… Con el cuello de jirafa Y las piernas de pantera. Ellos

Hay una estatua en Florencia Que nadie conoce Pero que me ofrece Todo el mármol de su cuerpo Y su sonrisa cansada

Aura suprema, besa mi garganta hel… Confiéreme la gracia de la vida, d… El suplicio de la sangre, la majes… De la nube. Que en cada gota del… Haya tristeza, sombra y amor. ¡Oh…