Con los pies descalzos por los cha… y la cabeza apoyada en los hombros… recorro las calles de una ciudad q… aunque no tanto como yo... Mis sombras me acompañan haciéndom…
Voy a vivir en mis extremos, en los confines de lo que nada ter… porque nunca comienza. Los delirios permanentes de mi men… y yo me dejaré llevar por ellos.