Recostado en el lecho sombrío de la habitación de los tiempos descubro por primera vez tu sensualidad y solo tan solo te apareces y entonces sin alma vuelo como un ave que se va a lo lejos pero no pierde el sentido, siempre esta cerca de caer al infierno pero lleva consigo un encargo que lo compromete con su cielo, en cualquier momento el sueño se hace anhelo y sigo como si nada mi camino, esclavo de tu encanto.