Con el sueño entre mis manos.
Un sueño; algunas ilusiones vagas que nacieron en una noche de letras...
De caías tan fuertes que dejaron inconsciente parte de mi corazón, de pocos suspiros que forjaron miedos tan altos que deje que me consumieran por completo.
Excusas para hacerme mierda, para fallar a propósito y que otros cedieran su paso por encima de mis costillas.
Escupí el resto de mis sueños en el suelo hasta que dejaron de aparecer, dolió ver tan de cerca la desesperación que casi muero.
Controlando otro dolor infinito, que dejó una partida y un regreso, sin condiciones, sin dar mucho de que pensar, sin el sencillo deseo de volver a aquel amor que tanto añore, sin la excusa de sentir dolor.
Sólo otra fuente de paciencia y de riesgo que desde ya, puedo tener la mas mínima idea por si de nuevo, caigo ahogándome entre tanto llanto.