Transparencia del alma.
Transparencia del ser que la rodea.
Para verla hasta el fondo, basta una sola lágrima sincera.
Riendo te pareces a todas las que ríen,
mas, llorando, eres tú... Nada es posible
comparar a tu alma, cuando lloras...
Sí, hay algo tal vez: entre la aurora,
el canto fino, blanco, de la alondra...