#Chilenos #Mujeres #PremioNobel #SigloXX #1922 #Desolación #Vida
Para nadie planta la lila o poda las azaleas y carga el agua para nadie en baldes que la espejean. Vuelta a uno que no da sombra
¿Cómo quedan, Señor, durmiendo lo… ¿Un cuajo entre la boca, las dos s… las lunas de los ojos albas y engr… hacia un ancla invisible las manos… ¿O Tú llegas después que los homb…
Algo se asoma y gestea y de vago pasa a cierto, un largo manchón de noche que nos manda llamamientos y forra el pie de los Andes
La bailarina ahora está danzando la danza del perder cuanto tenía. Deja caer todo lo que ella había, padres y hermanos, huertos y campi… el rumor de su río, los caminos,
Están redimiendo el cobre con las virtudes del fuego. De allí va a salir hermoso como nunca se lo vieron las piedras que eran sus madres
Amo las cosas que nunca tuve con las otras que ya no tengo: Yo toco un agua silenciosa, parada en pastos friolentos, que sin un viento tiritaba
Duérmete, mi niño, duérmete sonriendo, que es la ronda de astros quien te va meciendo. Gozaste la luz
-«Jugamos nuestra vida y bien se nos perdió. Era robusta y ancha como montaña al sol; Y se parece al bosque
¡Qué hermosa corre la ruta de Rapel al río Laja antes de que lluvia o nieblas la pongan bizca o cegada! Sin brazo alzado conduce
Libros, callados libros de las est… vivos en su silencio, ardientes en… libros, los que consuelan, terciop… y que siendo tan tristes nos hacen… Mis manos en el día de afanes se r…
Ya me voy porque me llama un silbo que es de mi Dueño, llama con una inefable punzada de rayo recto: dulce-agudo es el llamado
Yo no quiero que a mi niña golondrina me la vuelvan; se hunde volando en el Cielo y no baja hasta mi estera; en el alero hace el nido
Aquel mismo arenal, ella camina siempre hasta cuando ya duermen lo… y aunque para dormir caiga por tie… ese mismo arenal sueña y camina. La misma ruta, la que lleva al Es…
Del hombre fugitivo sólo tengo la huella, el peso de su cuerpo, el viento que lo lleva. Ni señales ni nombre,
Tenías, ay, tenías cielo y tierra… abiertos, y dorados y extendidos: en tus dos ojos griseaba la caña y el cafetal estaba en flor y en s… y los granados rompían el aire.