#Epigramas #EscritoresNicaraguenses (1961)
Verdes tardes de la selva; tardes tristes. Río verde entre zacatales verdes; pantanos verdes. Tardes olorosas a lodo, a hojas mo…
De pronto suena en la noche una sirena de alarma, larga, larga, El aullido lúgubre
Yo he repartido papeletas clandestinas Gritando ¡Viva la Libertad! en plena calle
Ni con joyas de la joyería Morlock ni con perfumes de Dreyfus ni con orqídeas
Me contaron que estabas enamorada de otro Y entonces me fui a mi cuarto Y escribí ese
Si cuando fue la rebelión de abril me hubierna matado con ellos yo no te habría conocido
Viniste a visitarme en sueños pero el vacío que dejaste cuando te fuiste
Ya viene el General ya ... el General ya viene el General montado en su caballo blanco, rode… de guardias y guardaespaldas y dip…
Recibe estas rosas costarricenses, Myriam, con estos versos de amor mis versos te recordarán
Al perderte yo a ti, tú y yo hemos perdido: yo, porque tú eras lo que yo más amaba, y tú, porque yo era
Aquí pasaba a pie por estas calles, sin empleo ni puesto Y sin un peso Sólo poetas, putas
En la hamaca sentí que me decías no te escogí porque fueras santo o con madera de futuro santo santos he tenido demasiados te escogí para variar.
“No tengo otro” le he dicho y repetido muchas veces. Y oí que decía dentro de mí no con palabras confusamente pero precisas, decía dentro de mí
Todas las tardes paseaba con su madre por la Landetrasse Y en la esquina de la Schmiedtor todas las tardes
Como canta de noche la esquirina al esquirín que está sobre otra rama