¿Qué soy? Una gota en el mar o el mar en una gota,
un destello efímero, un suspiro en la nota.
Soy un reflejo de la vastedad que me rodea,
una pequeñez que al universo desvela.
Soy una gota en el mar, insignificante y pequeña,
pero en mi esencia, la grandeza se enseña.
Pues en cada gota de agua, el océano se encuentra,
y en cada ser humano, el universo se adentra.
Soy el mar en una gota, en cada latido de mi ser,
la fuerza y la energía que me hace florecer.
En cada pensamiento, en cada sueño que atesoro,
se encuentra el infinito, el mar que exploro.
Así que, ¿qué soy? Soy ambas cosas a la vez,
una gota en el mar, el mar en una vez.
Pues en cada uno de nosotros, el universo se expande,
y en cada instante de vida, la grandeza se despliega.