Pilar de democracia,
la Constitución emergente,
guardiana de la gracia
que al pueblo estadounidense
da libertad y derecho a su gente.
Sus líneas son camino
que guía a la nación,
balance fino
entre poder y razón,
del ciudadano protección.
En ella se consagra
la voz del pueblo unido,
justicia que no flagra,
derecho defendido,
futuro siempre prometido.
Enmiendas la renuevan,
mas su esencia perdura,
los tiempos la prueban
y ella, siempre segura,
la democracia madura.
Faro en la tormenta,
escudo contra opresión,
su luz nos orienta
hacia la noble visión
de una libre nación.