Entre azáleas y peonías,
Mi vena lírica amanece viva.
Las flores me inspiran melodías,
Y el canto, entre sus pétalos, deriva.
El perfume del jardín me embriaga,
Y el canto de los pájaros me arrulla.
Entre sus tonos, mi lira se empapa,
Y mi pasión por escribir se reanuda.
Azáleas y peonías son mi musa,
Que despiertan mi verso apasionado.
En sus aromas mi inspiración se infusa,
Y mi poema surge, alado y afilado.