Mi musa morena
Bajo el cielo de azul intenso,
donde el sol con ardor se derrama,
la luna con su manto de plata
trae la noche y su encantamiento.
Oh, noche, madre de los suspiros,
de los labios cerrados y ardientes,
donde las estrellas se encienden
como ojos que sueñan despiertos.
El viento susurra en mi oído
historias de amor y de dolor,
mientras el mar, con voz profunda,
canta una canción de antaño.
Cae la niebla sobre la tierra,
como un velo que cubre el alma,
y en mi pecho una voz muda
llena el vacío con su llanto.
La pasión arde como un incendio,
en mi cuerpo se desata la furia,
como el huracán que se avecina
o el trueno que grita su agonía.
Pero en la distancia se escucha
un susurro de dulce calma,
la voz de una mujer herida
que me llama con su cantar.
Eres m mujer, la morena,
que con su voz hechiza mi ser,
moviendo las cadenas del alma
hasta romperlas sin piedad.
Oh, Amor, mi musa y mi dueña,
en tu voz encuentro mi destino,
en tu canto descubro el cielo
que siempre he buscado en vano.
Bajo el cielo de azul intenso,
donde el sol con ardor se derrama,
la luna con su manto de plata
trae la noche y su encantamiento.
