Vivamos en armonía,
que el alma viva en canción,
el amor sea la melodía
y la fe nuestra razón.
Que en la risa de los niños
nazca un cielo de bondad,
y en los brazos de los viejos
repose la eternidad.
La familia es el refugio,
el abrazo y el calor,
es un faro en la tormenta,
el reflejo del Creador.
Bajo su manto tejido
con hilos de humanidad,
hallamos fuerza y sentido,
paz, ternura y unidad.