Bendecidas Manos!
Manos que al despertar nos desperezan,
que preparan el pan de cada día,
que en el teclado tejen melodía,
de correos y textos que no cesan.
Manos que en el volante se enderezan,
guiando nuestro rumbo con firmeza,
que saludan con cálida presteza,
al amigo, al vecino, al forastero,
manos que en cada gesto sincero,
revelan del alma su grandeza.
Manos que curan, limpian y reparan,
que en el hogar mantienen el confort,
que al bebé mecen con dulce transporte,
y a los mayores con amor amparan.
Manos que en la cocina se declaran,
artistas del sabor y del sustento,
que en cada plato ponen el acento,
de tradición, amor y fantasía,
nutriendo cuerpo y alma día a día,
con un festín de aroma y sentimiento.
Manos que en el deporte se superan,
que en la música danzan con pasión,
que en la pintura plasman la emoción,
y en cada oficio su valor revelan.
Manos que al final del día se elevan,
en gratitud por todo lo vivido,
que se entrelazan en amor cumplido,
con las manos de aquellos que queremos,
manos que son testigos de que hacemos,
de cada instante un momento bendecido.
