—Amor De Cada Día-
Entre facturas y el tráfico denso,
florece nuestro amor en la rutina.
Tu sonrisa, al llegar, ilumina
el cansancio del día más intenso.
Cuando el estrés nos vuelve el humor tenso,
tu abrazo es la mejor medicina.
En la cocina, aunque la sopa no atina,
reímos juntos y el amor es inmenso.
Superamos las cuentas por pagar,
los trastes sucios, el grifo que gotea,
las discusiones por el televisor.
En cada “buenos días” al despertar,
en cada “que descanses” que aletea,
renovamos la fuerza de este amor.
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Este poema mantiene la estructura de soneto pero utiliza situaciones y objetos cotidianos para ilustrar cómo el amor supera los obstáculos diarios. Menciona elementos como el tráfico, las facturas, el estrés laboral, las tareas domésticas y pequeñas discusiones, mostrando cómo el amor persiste y se fortalece a través de estas situaciones comunes
