Intenta enamorarte de todo; de esas noches donde no puedes dormir porque tienes unos cuantos recuerdos adheridos a tus pestañas. De esos errores que te hicieron llorar largas horas porque aprender duele, mas cuando se nos obligan a tomar lecciones a cambio de unas cuantas alegrías, sueños, amores, besos, caricias, memorias, deseos. Enamórate; Enamórate de la soledad que sientes en ocasiones, aunque sientas cerca mi cuerpo, aunque escuches mis palabras, aunque mis manos acaricien tus senos y tus besos cobijen mis noches ebrias; aunque las sabanas nos insulten por lo obscenos que hayamos sido la noche anterior, Enamórate de la compañía que te ofrezco, quizá no todo el tiempo, pero si la mayor parte de mi tiempo.

No temas enamorarte, no temas tomar un café y sorprenderte por el mismo sabor de siempre, de la briza que te despeina y te hace lucir desarreglada y coqueta, divertida y espontanea, enamórate de tu cabello cuando juego con el y se pone celoso de cuando nuestros labios se juntan, no temas enamorarte de los momentos en los que nos volvemos indiferentes y aun así, se nos escapan algunas sonrisas, que las discusiones no eviten que te enamores de la vena que se brota en tu cuello, o en tu frente, pero tampoco temas ya no estar enamorada, que siempre hay oportunidades para comenzar, para crear, para destruir, para olvidar y vivir, morir sobre todo.

No temas ya no estar enamorada de mi, y lo mas importante de todo, no evites enamorarte de alguien mas. No digas que no, si quieres ir con un amigo a comer, a bailar, a cantar, a componer poesía con sus cuerpos. Enamórate de sus detalles si valen la pena, enamórate de sus verdades si son realmente algo que te haga ver a través de el, y por que no, enamórate de sus mentiras, por que te harán ver que clase de persona es. No evites poder encontrar a alguien mas, que mi amor no enjaule a tus manos, a tus ojos, a tus ganas de ser mujer, a ser querida, a liberarte, a experimentar el amor, a tocar, a reír, a verte reflejada en otros ojos que quieran entregarte mas que yo, y quizá si puedan hacerlo, no te encierres en mis “te quiero”, en mis poemas, en mis penas, en mis angustias, pero si te queda tiempo, enamórate de ellas, consiente a mi soledad.

Enamórate de ti misma, a través de lo que hago para ti, de los regalos que dejo bajo tu vientre, de las sorpresas que mi lengua dibuja en tu cuerpo, de las salidas a lugares extraños para sentirnos extraños, de las cenas poco románticas y de nuestras fotografías donde la felicidad hizo que cerraras los ojos, de las historias que contamos de cuando hayan pasado años. Enamórate de como el tiempo nos hace olvidar, de como las cartas de amor nos hacen llorar, de como las películas nos transmites buenas y malas emociones, de las noches, del sexo, del licor, de las maldiciones, del nosotros que ahora existe, y del nosotros cuando ya no exista. Solo enamórate, de mi o de cualquier otro. Pero vive.
Ilustrador:desconocido
G.Ll