#Cubanos #Matanceros #Mujeres #ParaNiños #SigloXX
¿Has visto a la mariposa danzando sobre el rosal para saludar la rosa...? ¿O los vuelos del zunzún alrededor de las flores
El caballo negro iba por un trillo: cada paso suyo bordaba el camino. El caballo ruano
Escóndete, caracol: no asomes tus cuernos largos. Cuando salgas de paseo no saludes a los pájaros, ni con otro caracol
Prende tus luces cocuyo de marzo: esta es la noche de hablar con el gallo. Compartiremos
El cielo es un espejo y la gaviota suelta su vela blanca desde la costa. Marinera del aire,
—¡Hola, Pinocho!, ¿qué haces ahí? —Busco una joya que ayer perdí. —Dime, Pinocho, ¿que joya?, di. —Un pedacito de mi nariz.
Al mediodía, cristal el agua, cristal las hojas, cristal el día. Cristal, cristales,
Le doy al niño de Chile la nueva patria que tengo: limpia y olorosa a limpio, patria dispuesta a quererlo como me quiere ella a mí,
La Habana es como una hermosa, limpia, fresca, alegre casa: sus puertas, de par en par, invitan a visitarla. Aquel que a Cuba respete
¡Jey, vaya, toro, con el arreo! Los toros toros, sus cuernos cuernos, en el camino
En el pozo viejo el sapo se baña; la luna, traviesa, se mete en el agua. En el pozo nuevo
Siete relojes, siete semillas, siete pelotas y una sombrilla. Siete burbujas,
Caperucita Roja, juega conmigo: yo seré un día lunes y tú domingo. Juega conmigo:
De parte del aguacero que cubran con un paraguas al retoño del almendro. El coralillo rosado debe prestar atención:
Moterita de madera llena de polvos de arroz, con tapa de cristal fino y la mota de plumón. ¿De quién será la motera