Quiereme después del otoño
Lo escribí en un cuarto abandonado, no tiene mucho chiste pero andaba pensando demasiado las cosas.
Escribo la misma trama de sentimientos siempre, cubierta entre pilas de papeles sin lectores.
La intensidad de mis emociones me jode
Acumuladas en una pequeña caja sin dejarlas salir.
Cuando me veas a los ojos, buscando perfección y la parte superficial de mi que todos conocen no te convence, bueno, que te puedo decir de la completa. Tengo un intenso y privado apocalipsis, expresó hasta que no aguanto.
Cargo con los vacíos que presionan el pecho, mi ser se inquieta con cosas simples y no me sorprenden las cosas materiales, tampoco me prostituyo pronunciando palabras que no me nacen, por que quiero todo o nada, el amor nunca a medias, tengo un fastidioso amor al arte y a las cosas que me hacen sentir, entrego más de lo que debería. Me rehusó a dejarte cambiar mis frecuencias, que pase mis días conociendo aquel tic que tienes cuando te pones nervioso, como cantas las canciones desde el pecho, el sincronizarnos al coger y los miedos que te abruman.
Pero el dia que te dedique un poema, será ahí mi perdición, por que una vez plasmado en papel y con mis palabras ya habras estado en mi cabeza dando vueltas por un tiempo, y así , sin saber como entraste tampoco te podré sacar.
Ahora te digo y te pido, que si llega a suceder, quiereme no cuando conozcas mi cuerpo, no cuando me veas reir con todos, ni cuando ya me tengas.
Quiereme cuando se acabe el otoño y me quedé sin hojas bellas de colores, cuando lo superficial e idealizado sobre mi ya haya abandonado tus ojos y puedas verme realmente.
Hazlo cuando creas correcto, sin presiones, dejame ser yo para compartirlo contigo, cuando te entregue esa parte de mi que nadie conoce, la parte que duele y la parte que hace feliz, la íntima; cuando me conozcas de verdad, entonces quiereme.
Préféré par...
