Si piensas que la vida es adorable
la vida en adorable se convierte,
pues hacia ti sus gracias las revierte
y ya se quedan de manera estable.
Para hacerlo, resulta indispensable
de la confianza y de la fe valerte,
hacerle carantoñas a la suerte
y asirse con ahínco de su cable.
Si te fallara, todavía existe
otra manera fácil que es axioma,
que es cerrarle las puertas a lo triste
y abrirlas a lo alegre cuando asoma,
como también el recurrir al chiste
y tomárselo todo a pura broma.