Retrato de Hans Christian Andersen
Puedo mirar el puente y la tiniebla
Alzarse en la distancia como un sueño;
Demorar ya mis ojos en el agua
Que fluye silenciosa, eterna, triste,
E imaginar que escribe con la pluma
Alguna página inconclusa y breve
Como la tarde que fugaz escapa
Y que él no nombra y que quizás yo miro.