(A María Kodama)
#1976 #EscritoresArgentinos #LaMonedaDeHierro
Laberintos, retruécanos, emblemas, helada y laboriosa nadería, fue para este jesuita la poesía, reducida por él a estratagemas. No hubo música en su alma; sólo un…
Mirar el río hecho de tiempo y agu… y recordar que el tiempo es otro r… saber que nos perdemos como el río y que los rostros pasan como el ag… Sentir que la vigilia es otro sueñ…
Soy, pero soy también el otro, el… el otro de mi sangre y de mi nombr… soy un vago señor y soy el hombre que detuvo las lanzas del desierto… Vuelvo a Junín, donde no estuve n…
En el alba dudosa tuve un sueño. Sé que en el sueño había muchas pu… Lo demás lo he perdido. La vigili… ha dejado caer esta mañana esa fábula íntima, que ahora
Ni el esplendor del cadencioso tig… Ni del jaguar los signos prefijado… Ni del gato el sigilo. De la trib… Es el menos felino, pero siempre Ha encendido los sueños de los hom…
Alguna vez hubo una dicha. El hom… aceptaba el amor y la batalla con igual regocijo. La canalla sentimental no había usurpado el n… del pueblo. En esa aurora, hoy ult…
Quiero dejar escrito, acaso por primera vez, uno de los hechos más raros y más tristes de nuestra historia. Intervenir lo menos posible en su narración, prescindir de adiciones pintores...
Lejos de la ciudad, lejos del foro clamoroso y del tiempo, que es mud… Edwards, eterno ya, sueña y avanza a la sombra de árboles de oro. Hoy es mañana y es ayer. No hay u…
Un pintor nos prometió un cuadro. Ahora, en New England, sé que ha… veces, la tristeza de comprender q… Pensé en el hombre y en el cuadro… (Sólo los dioses pueden prometer,…
Ante la cal de una pared que nada nos veda imaginar como infinita un hombre se ha sentado y premedit… trazar con rigurosa pincelada en la blanca pared el mundo entero…
Tres antiguas caras me desvelan: una el Océano, que habló con Clau… otra el Norte de aceros ignorantes y atroces en la aurora y el ocaso, la tercera la muerte, ese otro nom…
“Nadie sabe muy bien por qué se enemistaron Moritán y el Pardo Rivarola y de un modo tan enconado. Los dos eran del partido conservador y creo que trabaron amistad en el comité. No lo r...
Durante cien otoños he mirado tu tenue disco. Durante cien otoños he mirado tu arco sobre las islas. Durante cien otoños mis labios
Qué importan las penurias, el dest… la humillación de envejecer, la so… del dictador sobre la patria, la c… que vendieron sus hermanos mientra… (los días que uno espera olvidar,…
Ya la espada de hierro ha ejecutad… La debida labor de la venganza; Ya los ásperos dardos y la lanza La sangre del perverso han prodiga… A despecho de un dios y de sus mar…