Recogido por Esteban Peicovich en su libro "Borges, el palabrista"
#Argentinos #PremioCervantes #SigloXX
No arriesgue el mármol temerario gárrulas transgresiones al todopod… enumerando con prolijidad el nombre, la opinión, los acontec… Tanto abalorio bien adjudicado est…
A los quinientos años de la Hégir… Persia miró desde sus alminares la invasión de las lanzas del desi… y Attar de Nishapur miró una rosa y le dijo con tácita palabra
Cabrera y Carvajal fueron mis nom… He apurado la copa hasta las heces… He muerto y he vivido muchas veces… Yo soy el Arquetipo. Ellos, los h… De la Cruz y de España fui el err…
Afuera hay un ocaso, alhaja oscura engastada en el tiempo, y una honda ciudad ciega de hombres que no te vieron. La tarde calla o canta.
El claro azar o las secretas leyes que rigen este sueño, mi destino, quieren, oh necesaria y dulce patr… que no sin gloria y sin oprobio ab… ciento cincuenta laboriosos años
Las naves de alto bordo, las azule… espadas que partieron de Noruega, de tu Noruega y depredaron mares y dejaron al tiempo y a sus días los epitafios de las piedras rúnic…
La vejez (tal es el nombre que los… puede ser el tiempo de nuestra dic… El animal ha muerto o casi ha muer… Quedan el hombre y su alma. Vivo entre formas luminosas y vaga…
El hombre llegó del sur de Inglaterra en un amanecer del invierno de 1877. Rojizo, atlético y obeso, resultó inevitable que casi yodos lo creyeran inglés y lo cierto es que se ...
A Nietzsche le desagradaba que se hablara parejamente de Goethe y de Schiller. Y podríamos decir que es igualmente irrespetuoso hablar del espacio y del tiempo, ya que podemos presc...
El Dios a quien un hombre de la e… apresó en una playa que el bochorn… se convirtió en león, en dragón, e… en un árbol y en agua. Porque el a… Es la nube, la irrecordable nube,…
Los ordenes de libros guardan fiel… en la alta noche el sitio prefijad… El último volumen ha ocupado el hueco que dejó en los anaqueles… Nadie en la vasta casa. Ni siquie…
¿Dónde estará mi vida, la que pudo haber sido y no fue, la venturosa o la de triste horror, esa otra co… que pudo ser la espada o el escudo y que no fue? ¿Dónde estará el per…
Tantos años huyendo y esperando y ahora el enemigo estaba en mi casa. Desde la ventana lo vi subir penosamente por el áspero camino del cerro. Se ayudaba con un bastón, con un torpe bas...
Dilató su valor sobre los Andes. Contrastó montañas y ejércitos. La audacia fue costumbre de su esp… Impuso en la llanura de Junín término venturoso a la batalla
Hengist quiere hombres. Acudirán de los confines de arena… de chozas llenas de humo, de tierr… de lobos, en cuyo centro indefinid… Los labradores dejarán el arado y…