Laberinto
Writter Armida Patterson
Entré a este laberinto sin si quiera saber cómo.
Ni sé dónde está la entrada y mucho menos sé dónde encontrar la salida,
tan sólo me percaté de que ya me había adentrado lo suficiente como para sentir la asfixia,
rodeada de espejos donde veo tantas versiones de mí pero en ninguna puedo reconocerme como me gustaría.
Suenan a mi alrededor las mismas preguntas de siempre que,
aún me sorprende que crean que me encuentro en capacidades para responder,
tengo frío y observo mis pies que parece que están sujetos a esta tierra,
¿cuánto más habrá por recorrer?
toda mi vida se me ha enseñado a justo lo contrario,
caminar sin parar,
perseguir sin final,
levantarse, seguir, avanzar,
para cada enseñanza tuve que presionar el botón de quitar sonido,
no hay nada más que pueda escuchar,
hay plantas y ramas sujetándome a esta tierra,
no hay luz ni música que cantar,
sólo una presión hecha presente en el pecho que me hace pequeña, me es difícil hallar razones suficientes, deseos a las estrellas, oraciones a los Dioses,
sabiendo con verguenza que aquí me metí yo misma.
que no sé cómo entré ni sé cómo salir,
la puerta que me regrese a casa habré de encontrar algún día,
y tal vez, sólo tal vez, me traiga de vuelta a ti.
