(1992)
*(Unforgiven, filme dirigido por Clint Eastwood.)
#Españoles Del del frío libro
Cuando me extiendo junto al mar, existe el agua y su palpitación y un cielo azul cuya profundidad es demasiado grande para mí. Sentir el mar, su lentitud vivient…
Retrocede, combate hacia atrás, corazón mío. Cíñete al amor, queda activo en cuerpos, en materiales amantes.
Todos los días salgo de la cama y digo adiós a mi compañera. Vena: cuando me pongo los pantalones, me quito
Detrás de la oscuridad están los r… Yo ví su piel trabajada por relámp… ya sólo veo, en el instante amaril… el resplandor de sus lejanos párpa…
Vienen con lámparas, conducen serpientes ciegas a las arenas albarizas. Hay un incendio de campanas. Se oye gemir el acero
Cuando yo tenía catorce años me hacían trabajar hasta muy tarde… Cuando llegaba a casa, me cogía la cabeza mi madre entre… Yo era un muchacho que amaba el so…
A la penumbra auricular no viene n… amanecer. Muge el silencio en las… membranas. Silban los pájaros y tu… Tú no estás ya en tus oídos. * * *
Yo invoco la cabeza más sagrada que exista debajo de la nieve. Mi corazón azul canta purificado por el silencio.
Hubo un tiempo en que mis únicas p… y la lluvia. Ahora siento la pureza de los lími… si dijese su nombre. * * *
Yo no entro en ti para que tú te p… bajo la fuerza de mi amor; yo no entro en ti para perderme en tu existencia ni en la mía; yo te amo y actúo en tu corazón
Un día el mundo se quedó en silenc… los árboles, arriba, eran hondos y… y nosotros sentíamos bajo nuestra… el movimiento de la tierra. Tus manos fueron suaves en las mía…
esta mañana lluviosamente azul, amparado únicamente por mi paraguas intrínseco, he logrado acercarme a tu juguetería; quiero decir, claro es, a tu juguetería Liminalmente hablando, te ...
El vigilante de la nieve: 1. El vigilante fue herido por su… Describió con sus manos la forma d… cabellos que ya no amaba. Todas las causas se aniquilaban en…
Ví lavandas sumergidas en un cuenco de llanto y la visión ardió en mí. Más allá de la lluvia ví serpientes enfermas –bellas en sus úlceras transparentes–, frutos amenazados por espinas...
Tú en la tristeza de los urinarios… (amor, amor en las iglesias húmeda… ah, sollozabas en las barberías (e… estaban dentro de tus ojos): así es el llanto.