#Españoles
Hubo un tiempo en que mis únicas p… y la lluvia. Ahora siento la pureza de los lími… si dijese su nombre. * * *
Propongo mi cabeza atormentada por la sed y la tumba. Yo quería despedir un sonido de alegría; quizá sueno a materia desollada. Me justifico en el dolor. No hay…
Si pudiera tener su nacimiento en los ojos la música, sería en los tuyos. El tiempo sonaría a tensa oscuridad, a mundo lento. Mezclas la luz en el cristal sedie…
esta mañana lluviosamente azul, amparado únicamente por mi paraguas intrínseco, he logrado acercarme a tu juguetería; quiero decir, claro es, a tu juguetería Liminalmente hablando, te ...
En Bolivia y en ti y no en la mu… pensamos, capitán. Hubo silencio una noche no más. Hirvió el acero otra vez hasta el fin. Y vino el d… y todo el mundo se llamaba Ernesto…
1. Tu cabello en sus manos; arde e… de la nieve. Son las cebadas, la siesta de las… pasado. Abre tus ojos para que yo vea las…
Mi manera de amarte es sencilla: te aprieto a mí como si hubiera un poco de justici… y yo te la pudiese dar con el cuer… Cuando revuelvo tus cabellos
Un día el mundo se quedó en silenc… los árboles, arriba, eran hondos y… y nosotros sentíamos bajo nuestra… el movimiento de la tierra. Tus manos fueron suaves en las mía…
Cuando tamaño significa lo grande y lo pequeño Tamaño insistente, impune de la saciedad
Yo invoco la cabeza más sagrada que exista debajo de la nieve. Mi corazón azul canta purificado por el silencio.
La luz hierve debajo de mis párpad… De un ruiseñor absorto en la ceniz… y la mirada inmóvil de las bestias… Todo es presagio. La luz es médul… arden en mí los significados.
1. El animal que llora, ése estuvo… el animal que lame las heridas bla… ése está ciego en la misericordia; el que duerme en la luz y es miser… ése agoniza en el relámpago.
Ví lavandas sumergidas en un cuenco de llanto y la visión ardió en mí. Más allá de la lluvia ví serpientes enfermas –bellas en sus úlceras transparentes–, frutos amenazados por espinas...
Cuando me extiendo junto al mar, existe el agua y su palpitación y un cielo azul cuya profundidad es demasiado grande para mí. Sentir el mar, su lentitud vivient…
Todos los días salgo de la cama y digo adiós a mi compañera. Vena: cuando me pongo los pantalones, me quito