de El dulce daño, 1918
#Argentinos #Mujeres #SigloXX #Suicidio
En el fondo del mar hay una casa de cristal. A una avenida de madréporas da.
Siete veces hicimos en media hora el mismo camino. Íbamos y volvíamos al lado de la verja de un jardín, como sonámbulos. Respirábamos la humedad nocturna y olorosa que subía de los cant...
Soy suave y triste si idolatro, pu… bajar el cielo hasta mi mano cuand… el alma de otro al alma mía enredo… Plumón alguno no hallarás más blan… Ninguna como yo las manos besa,
Tenías miedo de mi carne mortal y en ella buscabas el alma inmortal. Para encontrarla, a palabras duras, me abrías grandes heridas. Entonces te inclinabas sobre ellas y aspirabas, terri...
Las cosas que mueren jamás resucit… las cosas que mueren no tornan jam… ¡Se quiebran los vasos y el vidrio… es polvo por siempre y por siempre… Cuando los capullos caen de la ram…
Morir como tú, Horacio, en tus ca… y así como en tus cuentos, no está… un rayo a tiempo y se acabó la fer… Allá dirán. No se vive en la selva impunemente…
Redoble en verde de tambor los sap… y altos los candelabros mortecinos de los cardos me escoltan con el a… que un sol esmerilado carga al hom… El sol me dobla en una larga torre
Te ando buscando, amor que nunca l… te ando buscando, amor que te mezq… me aguzo por saber si me adivinas, me doblo por saber si te me entreg… Las tempestades mías, andariegas,
Me protegen tus brazos del inviern… Bajo su amparo tierno Dejo pasar las horas en letargo Triste y largo. Siento que toda cosa me es amada,
Oh mar, enorme mar, corazón fiero De ritmo desigual, corazón malo, Yo soy más blanda que ese pobre pa… Que se pudre en tus ondas prisione… Oh mar, dame tu cólera tremenda,
Esta noche al oído me has dicho do… Comunes. Dos palabras cansadas De ser dichas. Palabras Que de viejas son nuevas. Dos palabras tan dulces que la lun…
Me levanté temprano y anduve desca… Por los corredores: bajé a los jar… Y besé las plantas Absorbí los vahos limpios de la ti… Tirada en la grama;
Unos besan las sienes, otros besan… otros besan los ojos, otros besan… Pero de aquél a éste la diferencia… No son dioses, ¿qué quieres?, son… Pero, encontrar un día el espíritu…
El rosal en su inquieto modo de fl… va quemando la savia que alimenta… ¡Fijaos en las rosas que caen del… Tantas son que la planta morirá de… El rosal no es adulto y su vida im…
Las dulces mensajeras de la triste… son avecillas negras, negras como… ¡Negras como el dolor! ¡Las dulces golondrinas que en inv… y que dejan el nido abandonado y s…