Vida que brotas, agua y raíces, cantas al viento verdes matices. Eterna danza,
La vida canta, su risa es un torrente, sol que levanta las sombras de la mente. Florece el día,
Bajo un cielo sin luz, sus pasos s… el viento helado canta sobre el po… y las sombras del hambre nunca se… La calle los cobija con su manto m… y sus ojos, vacíos, buscan algún d…
En la tibia penumbra de la cocina tus manos y las mías bailan una danza callada. El agua hierve su impaciencia, la cafetera tiembla de aroma
El abuelo va despacio con su bastón de nogal; me sonríe y me saluda, tiene un gesto paternal. La abuela teje en su silla
En el agua dormida de la calle, donde la lluvia dejó su rastro, una sombra se asoma sin prisa, un eco de luz, un destello abstrac… Soy yo y no soy,
Ya no eres esa rosa de Milton o la de de Rimbaud, o la de Sandr… se marchitó su fulgor en la sombra… se deshojó su esplendor en tu voz. No eres la rosa de antiguos poetas…
Horas calladas de fuego oculto, donde el cielo suspira un azul inc… Los días llevan murmullos rotos, eco distante de un ayer desierto. El viento juega con hojas cansadas…
Nací yo para adorarte, Naciste tú para mí. Destino en versos de mármol, dictados en oro y rubí. Los astros fueron testigos,
Las flores del banquete En el jardín de los sueños hay flores de mil sabores, dulces como los suspiros, crujientes como tambores.
Entre capotes y sombras, en la plaza se alza el día, Valentina, la torera, como un sol resplandecía. En sus manos, seda y fuego,
Cada noche, cuando enciendes la lá… y su luz resbala por tu espalda, comienza un poema en mi boca. Es el agua que aún brilla en tu cl… la sombra curva en tu cintura,
Alumbra el sol su radiante esplend… Mientras sus ojos reflejan dulzura… Alegre camina dejando su amor, Llenando los días de luz y ternura… Inspira su risa un cálido afán,
No es su aroma, ni el tacto de sus pétalos dormido… ni la sombra que proyecta bajo la tarde extinta. La rosa es otra cosa.
Tierno Rey, luz nacida, manso grey, dulce vida. Dios eterno