Busca un rincón humilde en tu mora… donde la luz del alma sea refugio, y en él coloca con manos calladas el corazón que abraza al Niño just… Toma un cielo de estrellas bien bo…
La vida es una torre, levantada con sueños y huesos, con manos que apilan certezas y dudas que tambalean el alma. Ladrillo a ladrillo,
Cae miel dorada, brilla en su fulgor, flor iluminada, sueño y resplandor. Si no está conmigo,
Era tan frágil como un ave que cayó al suelo desde su nave. Tenía el ala
Todavia arde la lampara que encend… Aun cantan los ruisenores en los p… Quedan cartas sin abrirse en cajon… Siempre queda una flor viva entre… Todavia guardo el vaso que tocaste…
Podría alzar mi voz como un relámp… romper el cielo a fuerza de palabr… pero sin amor—piedra entre las bra… mi fuego es solo eco sin descanso. Podría darlo todo, sin embargo,
Brisa de miel, roza mi piel, luces de abril, llamas sutil. Besos de sol,
Días verdes de bosque, y días azules de mar, el viento canta en los árboles, las olas juegan sin cesar. Las hojas susurran secretos,
Flechó Cupido, ¡vaya puntería! Caí rendido sin son ni guía. Corre y se esconde,
En la penumbra canta el viento air… tejiendo en plata el velo de la lu… el cielo diáfano, con luz ninguna, guarda el latir de un pecho desola… Amor errante, fuego desbordado,
En el borde del día se descuelga la luz, como si alguien hubiera olvidado cerrar del todo la ventana. La brisa apenas existe.
Me miro en el río callado, en el brillo húmedo del suelo, en los ojos que me observan como un eco sin tiempo. Eres tú y soy yo,
Consentir a mamá, es un tributo a su amor infinito. En cada caricia, en cada palabra de aliento, ella ha tejido con hilos de ternura el refugio de nuestra existencia. Ella que nos dio ...
Nací yo para adorarte, Naciste tú para mí. Destino en versos de mármol, dictados en oro y rubí. Los astros fueron testigos,
Yo traigo la sazón en mi bandera, naranja, ajo y miel en dulce abraz… el ron se vierte lento, paso a pas… y el comino perfuma la madera. La salsa brilla al fuego que esper…