He aquí que por fin llega al verbo… tristísimo minuto, lento rodar del día miserable, diminuto captor de lo que nunca pu… Un día como alguno

Una vieja llama y pide: ruega. Nadie escucha. Sólo el agua

El mar castiga el clamor de las bo… que pasan sin miedo de pisar a los… a aquellos que besándose sobre la… toman formas de conchas de dos en… El mar bate sólo como un espejo,

Dime, dime el secreto de tu corazó… dime el secreto de tu cuerpo bajo… quiero saber por qué ahora eres un… esas orillas frescas donde unos pi… Dime por qué sobre tu pelo suelto,

Perdonadme: he dormido. Y dormir no es vivir. Paz a los h… Vivir no es suspirar o presentir p… ¿Vivir en ellas? Las palabras mue… Bellas son al sonar, mas nunca dur…

Más allá de la vida, mi amor, más… Ahora ligeros, únicos, sobre un le… Poblamos a la noche sin límites, v… En muerte, oh hermosa mía, una noc… Sobre un seno azulado reposa bland…

No. ¡Basta! Basta siempre. Escapad, escapad: sólo quiero, sólo quiero tu muerte cotidiana. El busto erguido, la terrible colu…

Vienes y vas ligero como el mar, cuerpo nunca dichoso, sombra feliz que escapas como el a… que sostiene a los pájaros casi en… Dichoso corazón encendido en esta…

Calla, calla. No soy el mar, no s… ni tampoco soy el mundo en que tú… Soy ei calor que sin nombre avanza… sobre las arenas donde quedó la hu… sobre el rostro que duerme como du…

Pero otro día toco tu mano. Mano… Tu delicada mano silente. A veces… mis ojos y toco leve tu mano, leve… que comprueba su forma, que tienta su estructura, sintiendo bajo la p…

Después de todo lo mismo da el cal… una dulce hormiguita color naranja… una guitarra muda en la noche, una mujer tendida como las conchas… un mar como dos labios por la aren…

Ya no es posible. No digas tu nombre emitiendo tu mú… como una yerta lumbre que se derra… como esa luna que en invierno repa… su polvo pensativo sobre el hueso.

Un pájaro de papel en el pecho dice que el tiempo de los besos no… vivir, vivir, el sol cruje invisib… besos o pájaros, tarde o pronto o… Para morir basta un ruidillo,

No es tu final como una copa vana que hay que apurar. Arroja el casc… Por eso lentamente levantas en tu… un brillo o su mención, y arden tu… como una nieve súbita.

Así acaricio una mejilla dispuesta… ¿Me amas? Me amas como los dulces… a su tristeza mansa inexplicable. Ámame como el vestido de seda a su quietud oscura de noche.