Fuiste mi aliento
Mi sosiego
Un esbozo en el tiempo
un retrato de invierno
un recuerdo lejano
de un tiempo inesperado
un despiste enamorado
un aliento desahogado
intento ser fuerte
intento ser valiente
busco dejar distancia
entre un velo de nostalgia
intento mantenerte
cerca de mi mente
lejos de mi cuerpo
suspiras en mi miedo
vences a mi sueño
ganas a mi empeño
desvelas a mi tiempo
miras mis desvelos
escucha en tu oído
susurros de amores venidos
lejos de tu vientre
mi mente sufre la muerte
lejos de tus ojos
la vida ya no es gozo
tu sientes
los que son fuertes
tus suspiros,
mis gemidos
siento no pertenecerte
porque odio perderte
pero no puedo amarte
si tu no eres arte
encerrado en este lienzo
no veo más que tu destello
observando tu cabello
me siento como un simple ello
siento, mirando tu cuerpo
que me encuentro sin aliento
beso tu recuerdo
hasta la llegada del encuentro
pienso en ti. Me esmero
para no caer el primero
sobrevivo con tu aliento
al rozar mi sentimiento
mi cristal empañado
por tu sentimiento disfrazado
soy una pintura
no puedo rozarte como si haría de ser escultura
pienso en ti cada segundo
tu eres mi mundo
adoro tu taconeo,
tu paseo
te escucho hablar a los niños
de tiempos pequeños
atiendo, esperando el momento
de que mi turno sea encomendado
te oigo hablar
con tus recuerdos de mar
traes a tu lado
la alegría de los hados
piensas con tus ojos
sonríes con tus gozos
pasas por mi vitrina
con el alma de una golondrina
hablas mirándome
como un recuerdo amigable
pienso en abrazarte
cuando no soy más que un estandarte
siquiera en acariciarte
cuando no puedo ni rozarte
estoy encerrado
muerto, engañado
no viviría
de no ser por tu compañía
no poseo otra vida
más que observar tus venidas
soy tu esclavo
tu siervo
solo te sigo,
te admiro
te pienso
¡Tu! eres mi suspiro
mi cuerpo es el maldito
¡el perdido!,!el vestido!
sin aliento
escuche el cuento
oí la muerte
de labios de la serpiente
caí preso
de tu beso
porque quería quitar,
robar
y matar
con maldad
el alma pura
de una joven sin atadura
sentí en ese momento
que era su corazón más inmenso que mi aliento
quise ver en su cuerpo
la belleza del paso del tiempo
todos nosotros rotos
llenos de heridas de un destino rencoroso
recubiertos
con el sueño de los tiempos muertos
engañados,
estafados
pero mi corazón
ya no respondió al mandato sin razón
sino al del amor
fruto de ángeles sin horror
siervo ahora de esta mujer
sueño con la idea de poder ver
llegado el momento
las ideas de nuestro encuentro
pienso reconocer
al dar el paso de crecer
la ambrosía que desprenden esos labios
llenos de cambios
me lleno de alegría
al recordar tu simpatía
tu guardián
soy yo ese que renunció al mandar
siento crecer my corazón
aunque este muerto, encerrado dentro de una sin razón
Y te sigo observando
quieto, petrificado
Recuerdo ahora
nuestro primera hora
recién llegado
me encontraba yo asediado
mis demonios bagaban
por mi mente, andaban
pero a ellos yo ya nos les temía
les reconocía
eran otros los temores
que enfundaban mis dolores
aquellos recuerdos
ya muy bien perdidos
aquel último día
en el que desee ser un recuerdo, un simple había
estaba
mejor dicho, me encontraba
cerca de la salida
esperaba tirado en la vida
que una de esas damas
ya sabéis, de aquellas que les gusta compartir camas
quisiera de mi dinero
a cambio de compartir su asidero
pero ni siquiera esas
se me acercaban a las piernas
mi pobreza era comprensible
y mi mierda jugaba a ser invisible
era un pordiosero
abandonado del dinero
huido por los niños
perseguido por sus años
mi edad no era la adecuada
mis gustos los de la gente poco amada
mi mente gritaba
pero mis oídos no querían ser objetos que no fuera de esa hada
ahh, la vieja droga
esa era mi ama y mi amiga
muy de joven
entre la porquería que no quieren
los ricos
o los políticos
pobre a la que consideré mi segunda madre
mi maestra y mi padre
un viejo de barbas blancas
me la dio al ver mis escasas ganas
me apunto
y me inyecto
mi comienzo fue prometedor
como así relataría para mi redentor
pase de ser ladrón pordiosero
a una amenaza para el futuro
de ser nadie
a ser alguien
el viejo muerto tenía razón
tu vida sera de pura convicción
sí, convicción para mi camello
al que termine rebanando el cuello
fui consciente en ese momento
de la muerte de un tonto
no me sentí responsable
al menos no en ese día miserable
fue entonces
cuando conocí a las coces
me las daban mis demonios
a los que con el tiempo consideré como amigos
fueron mi tormento
durante los momentos en los que estaba sediento
así que recurrí también al alcohol
este fue mi cura para el brillo del sol
entre drogas
mi juventud paso sin más
y entre falsas damas
los años de santas
conseguí llegar vivo a la vida adulta
pero seguí jugando con la disputa
continuaba pecando
insultando al Dios, amando
intentaba parecer puro y sagrado
para beber en la misa el vino, sangrando
mi corazón daba tumbos
dentro de las paredes de los sepulcros
y me ocultaba en cementerios
para huir de los horarios
dormía entre muertos
y bebía vino de huertos
robaba a las feas
para comprar a las bellas
y no sentía reparos
en maltratar a los hermanos
ni tampoco el golpear
o matar
si gracias a ello conseguía
traerme la alegría
el estar borracho todo el día
vida hacía
el tener entre mis venas
los éxtasis de las adrenalinas
el subidon de las sustancias
que por naturaleza eran sucias
la necesidad de estas
se hizo demasiado para mis escasas ventas
termine siendo burla andante
por pocos temido por muchos, solo un pedante
andaba dando tumbos
por la vida, sin rumbos
me hallaba tan perdido
sobretodo vendido
deshabitado por todo
hundido en el lodo
odiado por hermanos
maltratado por amados
entregue mi amor
a una pordiosera de color
sus grandes labios
no eran muy sabios
y decía tantas maldades
que no dude en huir con mis compadres
mi vida fue una mentira
encauzada por una sátira
un dibujo
un simple esbozo visto por un ojo
soy un simple desastre
un botarate, un simple sastre
porque ese era mi don
como muy bien mi madre me dio a su son
yo era muy chico
hasta entonces un simple bizco
mi cuerpo era pequeño
mi pensamiento escaso de un sueño
tuve por amigos
más si a los mendigos
por tutores
mis escasos dones
y por vida
bah, una pantomima
en ese último día
solo recuerdo la venida
la gloriosa llegada
de un hada amada
creí ver un ángel
creí soñar ante la venida
pensé estar salvado
pensé en ser llevado
mi madre aseguró en su muerte
“ Dios llegará para verte”
hay, que dulce mujer
maldigo aún su muerte del ayer
descubrí en aquella otra, de buen ver
los rasgos del saber
y la seguí sin demora
hasta la cosecha de la mora
ella las recogía
parecía una enviada de alguna alegría
que tonto de pensar
que alguien me pudiera amar
al recoger la cosecha
recuerdo como su boca era más ancha
aspiro de golpe
y miles de hombres cayeron de un tope
la miré lleno de pena
incapaz de creer que fuera aquella
cerré los ojos
espere con gusto sus despojos
pero fueron sus palabras las que me taladraron
las que me ahuyentaron
las recuerdo aún
no se escapan de mi baúl
fueron simples
de verdades loables
“es tu merecido”
“por usar el alma de un desconocido”
y la noche me atrapo.
desperté entumecido, como un muñeco de trapo
no sentía mi sentido
y despertaba lleno del dolor conocido
abrí los ojos,
pero estaban llenos de despojos
intente aclararlos
intente enjuagarlos
escuche entonces una risa
un canto a la misa
y la reconocí
me trajo la visión de como fui
desperté en un instante
en mi pasado abordarte
reconocí esas caras
llenas de canas
y escuche del viento
los errores de mi nacimiento
oí de mi madre
sus temores a mi padre
y vi con los ojos del tiempo
mis fallos que estaban llenos en mi cuerpo
observe mis peleas
y me parecieron callejeras
vi mis reproches
y asquee mis noches.
La bruja me soltó
de aquel desdichado sopor
pero estaba muy ocupada
observando mis dolores y mi escapada
me miró a los ojos
y me hecho los despojos
me liberó de mi atadura
y me quito de la herradura
entonces le pregunte:
“porque no muero en esta parte”
ella emitió un sonido, una risa
y no me contesto, miró la brisa
y susurro, despacio
“hay otro que desea tu espacio”
“tu vida” Recalcó
“tu cuerpo lleno de tiempo”
la miré fijamente,
incapaz de creer lo que recalcaba mi mente
mi vida sería robada
mi alma escupida, fuera de mi cuerpo, envenenada
atada a otro
muerta dentro
ahora me reí, alto
pensaba en ese otro tonto
no sabía sus razones,
tampoco me importaban.
Pero si sabía una cosa
que su vida iba a ser asquerosa
que desearía la muerte
en cada día, en cada noche
que solo querría irse
alejarse de mi mundo, ahuyentarse
así mismo
cada día y en cada istmo
huir de su destino
y morir en cada escondrijo
beber hasta perder el sentido
y rezar por el roce de un timo
su boca llena de blasfemias
y su cuerpo, envenenado por las penas
quizá sería más listo
pero no huiría de mal trato
tampoco de un trago
ni mucho menos de hacer el bago
no solo recibiría un cuerpo carcomido
envejecido, podrido....
No, él se llevaría el premio
de ir guiado por una mente hueca
de ser timado,
en todo lados
de ser la risa
de los mal-hablados
de escupir en las calles
y vomitar en los lares
de despertar
cada día un lar
Y de esconderse,
entre los taburetes verdes
de ser encarcelado
y aporreado
de ser insultado,
humillado y expulsado
de saberse sus tretas
hasta las damas llenas de penas
de no ser bien visto
ni siquiera por si mismo
de no poder volar
porque sabe de su caída
de desconocer la salida
y la espera se hace eterna
estoy convencido
que no verá lo nacido
girando opuesto
a las leyes del alto
teniendo un corazón
lleno de desazón
funcionando con poleas
y sacudiendo sus peleas
intentando seguir
optando por huir
y sin una sola idea
temiendo a las peleas.
Fui expulsado de mi cuerpo
llevado hasta un el cuadro
Encerrado
echado, repudiado.
Deje de sentir pena
y paso a ser la ira traicionera
con los ojos insensibles
vi como era llevado, delante de los despreciables
los demonios apostaban
y veían quien tendría mi vida
a los dados jugaban
y mi destino se rifaban
incapaz de gritar
o patalear
callé
y esperé
al amanecer mi pellejo
tenía nuevo dueño
un ser de piel rojiza
arrebató a la mi alza
recogió los pedazos que cayeron
y recompuso la muerte en ese callejón
fui tapado, transportado
en muchos museos cayado
con un nombre simple
lleno de temple
“Retrato de un hombre con manos en la cintura”
Era simple
Crucé mares y océanos
estuve cerca de maravillas llenas de años
Y cada noche con los mismos
escuchaba viejos recuerdos
cada uno era un borrón
contaban los mismo dentro de un cordón
para lo que habían sido pintados
dependían sus partidos
si eran esculturas de romances
me llevaban hasta le noche de sus roces
Todos eran muñecos
hechos con ceras y adornos
no tenían recuerdos
ni tampoco sus pertinentes sentidos
no sabían del tiempo
solo de lo observado
me despedía de cada uno antes de volar,
o embarcar
y solo en una ocasión
conocí a otro hombre lleno de compasión
encerrado sin compasión
asqueado sin razón
de oír las mismas historias
de repetir las mismas respuestas
de mirar con asco
los despojos de su marco
Él era más antiguo que yo
mas viejo y mas callado
apenas le sacabas dos palabras
antes de que decidiera mirarte sin alma
me rompía los esquemas
de una vida hecha sin penas
por fin harto de observar
me llevaron a mirar
a su lado me aposentaron
y sus modos me odiaron
me incluyo en una nueva categoría
imbécil de anatomía
no entendía el significado de esas palabras
pero sabían que no eran buenas
recordé su historia
contada a tantos sin armonía
y vi en sus ojos
el resultado de los odios
tome de sus labios
sus recuerdos dolorosos
yo mismo me encontré
sintiendo pena por su poco saber
en mi mundo de egoísmo
encontré la pena por otro, mismo
y no supe como responder
más si me burle de su deber
y de lo que mi boca soltaba
risas no le respetaban
pero fue una batalla perdida
no derrumbé ni cause herida
no fui capaz de infligirle
ni un poco de amargo de este rifle
mi boca siempre causaba dolores
pero ahora veo que estaba llena de olores
nunca admití perder una batalla
porque nunca estuve en una, tiré la toalla
y ahora encerrado por siempre
revivo cada día en la soledad madura
y no entiendo si de verdad estas
soy solo un malestar
metido en el ojo del desconocido
siempre en la búsqueda de un amigo
con solo un apellido
luchando en la muerte del hundido
las estrellas ya no brillan
mi cuadro es gris, mandan
si ellos, mis ruinas
piensa en tus armas
nunca empuñe una
cobarde desde la cuna a la tumba
la muerte no disfrutaré
la vida no viviré
y el cuerpo no lo tendré
solo escuchando las voces del estaré
no soy
ni estoy
solo escucho
una voz de caucho
muerta dentro del alma
no sé vivir allí, donde descansa la salada
no sobreviviré
no buscaré
no amé
no escuché
solo estuve con la necesidad
empujado por la maldad
insana, escucha mi voz
ve mis palabras y encontrarás la coz
el caballo, nunca podré montar
de mi alma disfrutaré
de las vidas componer
una música con sabor del ver
ni las palabras recitar
con empuje de voz, quizá cantar
destrocé mi destino
escuche a mi enemigo
admirándolo
como a un Dios amarlo
mis labios escupidos
mis culpables son lo que no poseen apellidos
deudas a mares
escuchas a pares
amores rechazados
cuerpos vapuleados
mi mente vagaba en mi culpa
durante los años de mi atadura
llegado una muerte
fui echado de mi estandarte
y retirado al sótano
con otras obras sin amparo
muertas de vista
errores vistos por la salita
donde esta la compañía
¿y las visitas?
Me siento estorbando
en el abandono
solo
como un polo
sufriendo de nuevo
en la oscuridad, como un siervo
posees poder sobre mi
¡encima de mi!
Fui cruel
un siervo de poder
sin trabajo
como un despojo
suspiro mirando mi reflejo
observo venir al pasajero
ninguno dura mas de un día
un recuerdo de ambrosía
y visitan nuestra muerte
sin ver nuestro presente
no poseo dolor
no tengo un recuerdo del amor
nunca sentí ojos de sentimiento
encerrado en un pensamiento
orgulloso
del tiempo
todo me devora
me odias y ves a la víbora
las serpiente enroscada
en la muerte sabrosa
escalo la mentira
observando la sátira
escuchando al tiempo
oyendo al cuerpo
mirando el mundo
observando el miedo
culpando al muerto
de la vida del puerco
y escuchando al padre
tramando andares de madre
mirando a la botella
con deseo amargo de ella
fumándome las vidas
de las hadas
vistiendo las ropas de los engaños
asustando a los extraños
y discutiendo
con el sueño
recuerdo bien esa noche
el momento del descorche
una fragancia nueva me llego
no daba el pego
no parecía ser un cuadro
tampoco un lienzo
no era escultura
y caminaba sin atadura
su origen era humano
no artificial, mundano
un vistazo a la sala
y sus ojos pararon en mi ala
pregunto mi procedencia
explicaron mi convencía
ella me toco
me hecho un secreto de amor
pasión
y bastante desazón
todo ello revivió
todo ocurrió
nada lo invadió
nunca lo roció
la pena
recuerdo de la escena
la agonía
visita llena de poesía
solo soy una caminante
sin camino que llevar al parte
recorro solo
la verdad escucha el lodo
pisa mi recuerdo
destroza al poderoso
solo revivo la muerte
de un pasado vehemente
pero su sonrisa
hizo eco de la misa
su aliento rozo mi postura
y al su mano posar a mi altura
unos ojos miel
sonrisa fiel
unas manos de azucena
y un cuerpo lleno de saber
tocas el cielo
no eres del infierno
llegaste para tentarme
colocaste tu cuerpo para maltratarme
Fuego, pasión
un dolor lleno de desconsideración
una demolición
asolo mi corazón
mi pecho en llamas
mi cuerpo sin esperanzas
Pero a la vez llega la vida
la muerte pierde ante la simpatía
encuentro el amor
colocón sin razón
reconstruyo el sueño
perdido el el tiempo
recupero el sentido
revivo el perdido
asustado
con miedo del lodo
recupero el aliento
siento el peso del aprieto
no soy el recuerdo del viejo
tengo un recuerdo de un miedo
pienso en colocar amor
donde solo existe la desazón
colocar mis manos
juntarme a los hados
coloquemos el miedo
apartemos el siento
padezco en el olvido
las agonías del solsticio
recupero el aliento
yo tiento
recupero la cordura
la respiración sin atadura
pero el latido continua
no me deja descansar con esta armadura
no reconozco el dolor
solo noto el sopor
mis ojos ya no lloran
secos, olvidan
el dolor
el sentir temor
todo eso ya paso
el cuerdo dura un salto
todo muere
todo renace
aquello que el miedo impidió ver
es lo que la verdad amplia del saber
escucho tu latido
y te veo sin camino
me recuerdas a las Diosas
vestidas de esposas
si mi cuerpo escuchará
atendiera a la palabra
lamento la tensión
me duele mi sumisión
al tiempo poder retroceder
y las maldades sin sentido poder perder
a la luna no rezar
y observar la verdad de la mar
haber sido sordo
y no escucharlo todo
no tentar a mi cuerpo
no ser un telele de cuero
poder abrir los ojos
dormir sin piojos
tener un Dios
amar a un son
y ahora que amo
ahora que tengo en mi mano
no puedo abrazarla
no puedo ni siquiera rozarla
no tengo capacidad
de verla vacilar
pertenecer a la muerte
ella a la vida de la suerte
tener latido
no un recuerdo del sentido
poder verla vacilar
o sus pómulos sonrojar
retener sus labios
no verla con tantos
ser suyo y ella mía
poder vivir la vida
verla rodeada de niños
malcriados por los sueños
tenerla en mi cama
hacerla mía entre ambas
recorrer su cuerpo
retenerla en el tiempo
envejecer
verla perder
morirnos
y ascender juntos
soportar sus berrinches
consentir sus caprichos
y ahora, ¿que?
Si todo lo que veo es copia del ayer
cuando maldito me encuentro
veo la mujer de mis sueños
no poder tocarla
abrazarla o besarla
esta angustia me mata
de no ser por mi mala pata
ahora muerto de verdad
encerrado en el infierno de la saciedad
no la vería
solo rezaría
la salvación se me presenta
pero no puedo cogerla
agarrarla
atarla
sentirla
vivirla
¡Quiero estar vivo!
¡Poder saborear el olvido!
O, al menos, morirme
encontrar el descanso del timbre
dejar de oír el zumbido
poder dormir sin el cumplido
cerrar mis ojos
sentir el viento en los hombros
mojarme con la lluvia
revivir la simpatía
trasnochar
dormirme en un bar
besar a una mujer
retenerla como a un rehén
sentir las ropas
frescas en mis piernas
poder volver
a sentir el temer
una verdad
y una maldad
mi Dios escapo
a la vida del capo
ahora encerrado me ayo
pero no por mi sayo
siempre solitario
de recuerdo del salario
poco rezar
mucho pecar
su castigo dado
al amor rezado
vendido al mundo
como atracción de insulto
pero ahora sentía el amor
recuperado del sopor
decidí creer
dejar de ser
empezar a poder soñar
vencer mi eterno otoñal
ahora enamorado
de una mujer del mundo del siento
nunca mentiré
pero siempre pecaré
en este invierno
necesito de tu no
no te necesitaría
de no ser por la pecaría
el pillastre de mentiras
calló en tus trampillas
poderte tener entre mis brazos
es un sueño hecho para los pozos
mi desierto particular
mi deseo sin par
no hay belleza
sin la cabeza
perdida mi razón
y sin sentir la desazón
con la impotencia del no saber
del poco sentir y mucho beber
no soy experto en sentimientos
pero en los míos son tormentos
recluido en mis pensamientos
los años pasaron con sus treinta vientos
el cambio se produjo
el miedo recupero el embrujo
solo pendiente de mi
como en el tiempo del
acaso renuncie a la felicidad
o solo fui la causa de mi maldad
revivirla
recordarla
sentirla
amarla
abrazarla
la necesidad de Ella
De su caricia
y mi avaricia
haciéndonos daño
escudándome en el sueño
de poder rozarte
ha pasado el tiempo de abrazarte
a llegado el instante
de mostrarme
lo noto en mi cuerpo, en mi mente
en este instante
pestañee lentamente
y note mi presente
alcé la mano
rozando en mando
encogí los hombros
asustado volví a los escombros
mi respiración agitada
mi alma asustada
regrese a la postura
no me atrevía a seguir a la astucia
alguna palabra se escapo
mire mis labios con descaro
¡Ahora hablaban!
¡Se mostraban!
Seguía asustado
no estaba sentado
me estremecía como un loco
asustado de la sombra del coco
mostraba en mis ojos
los despojos
me vestía con la sombra
de no conocer a la tierra
mis pies querían poder tocar
pero mi mente temía el amar
el olor llegaba
tenue, ya lo extrañaba
esta vez podría besarla
tomarla
sonreí ante mi imaginación descabellada
estaba soñaba con la muestra de la llamada
mantendría mi postura
me mostraría a su altura
mi alma se rompió
no era ella la que me mostró
un hombre
sustituía a su nombre
copia burda
la ira de la burla
regrese a ser un hombre
baje de aquel lugar lleno de sangre
recorriendo mi cuerpo
mostrándome fuera de mi tiempo
la belleza del cuadro quedo intacta
pero me aleje de mi muestra exacta
los gritos
chillidos de los vivos
una mujer cayó al suelo
y yo pase al lado del cuerpo
mi mente la buscaba
mi cuerpo la amaba
un hombre igual de alto que yo
miraba mi reflejo, mi otro yo
lo golpeé
y lo maltraté
robe sus ropas
vistiéndome con estas
y me fui
simplemente hui
no escuchaba insultos
fue nuevo descubrir mis instintos
el nombre de mi amada
estaba pegado a una demanda
en un trozo de papel
escrito estaba para el saber
que ahora encontrada
muerta y hallada
en el cementerio
su cuerpo enterrado al lado del misterio
una mano me rozo
al girarme sentí el temor
la sonrisa de aquella dama
de la bruja que me encerró en la llamada
“¿Deseas verla?”
una frase tan sencilla me hacía mella, ¿Poder mirarla?
Asentí en silencio
y fui llevado al encuentro maldito
la muerte me la arrebataba
mi cuerpo lloraba
al lado de su tumba
mi alma enterrada en su..miraba..
era ya tarde
su cuerpo taladraba el ante
su rostro arrugado
lleno de tiempo ya dado
su cuerpo se iría
dejando solo, con la irá
“Debías ser castigado”
la bruja sonrió ante mi llanto
No podía creerlo
mi cuerpo encerrado en el santo
mi vida robada
mi amada matada
odio hacía la vida
volvería a vivirla sin simpatía
Marche sin alma
muñeco de mi cama
recemos
para que los muertos
recuperen la vida
y así ahogar las penas en mi salida
Es tarde
Es pronto
No es hora de llorar
sino de orar
veamos al tiempo
señor de nuestro destello
Es tarde para morir
Pronto para vivir
ahora que vivo estoy
no viviré el hoy
sufriré el destierro
seré golpeado con el hierro
aguantaré el dolor
que me hace mi propio amor
amar a una muerta
una viva en el recuerdo de la puerta
rosa marchita
pétalo en marmita
quemándose
destruyéndose
pudiendo sufrir.
¡Para que ser feliz!
Amar a la muerte
no poder pasar el puente
la vida, separada
de la verdad, la amada
sólo, de nuevo
sin otro amigo que el cuervo
alas negras
color de doncellas amargas
solo de ellas
amores llenas
vasijas de vino
olvidando el amor divino
no tengo el favor
del dolor
un cuchillo sangrante
dentro del magnate
del pobre sacrificio
dolor sin oficio
olvidados todos
odiados
maltratados
escudados
Las damas
de altas cunas
bajas magulladuras
mujer sin ataduras
despierta en mis ojos
las razones de los cojos
una rosa murió
al nacimiento de un Dios
el recuerdo quedó
encerrado con un simple adiós
tus sentimientos por mi
mis dolores por ti
demuestran
las ataduras
Sangre sangrante
dolor apremiante
solo recuerdas
las amigas de las cuerdas
recordándonos
a los viejos tonos
instrumentos caducos
llenos de saúcos
gusanos
alimentándonos
solo seras
la muerte de la seras
Diosa para mi vida
humana para la salida
en polvo convertida
mi amiga vencida
solo un recuerdo
vendido al miedo
un destino incierto
para un cuerpo muerto.