Vivo en un país libre cual solamente puede ser libre
en esta tierra, en este instante,
y soy feliz por que soy gigante.
Amo a una mujer clara que amo y me ama sin pedir nada.
O casi nada, que no es lo mismo pero es igual.
Y si esto fuera poco, tengo mis cantos que poco a poco
muelo y rehago habitando el tiempo,
como le cuadra a un hombre despierto.
Soy feliz,
soy un hombre feliz y quiero que me perdonen
por este día
los muertos de mi felicidad.