(1979)
#Cantautores #EscritoresCubanos #TrovaCubana
He estado al alcance de todos los… porque no cuesta nada mirarse para… He estado al alcance de todas las… que han querido tocar mi mano amig… Pero, pobre de mí, no he estado co…
Si me dijeran pide un deseo preferiría un rabo de nube, un torbellino en el suelo y una gran ira que sube. Un barredor de tristezas,
Si fuera diez años más joven, qué… y qué descamisado el tono de decir… cada palabra desatando un temporal y enloqueciendo la etiqueta ocasio… Los años son, pues, mi mordaza, oh…
En el borde del camino hay una sil… la rapiña merodea aquel lugar. La casaca del amigo esta tendida, el amigo no se sienta a descansar. Sus zapatos, de gastados, son espe…
Los caldeos, los asirios, la Roma… supieron resumir mejor; los helenos, los egipcios, los hij… ya estaban conversando del amor. Hubo templos y ciudades sólo para…
Como la muerte anda en secreto y no se sabe qué mañana, yo voy a hacer mi testamento, a repartir lo que me falta —pues lo que tuve ya está hecho,
Me decido a tararearte todo lo que se te extraña, desde el siglo en que partiste hasta el largo día de hoy. Me acompaño de guitarra,
La gota de rocío del cielo se cayó y en ella el amor mío la carita se lavó. Pero era tan temprano
Cuentan que cuando un silencio aparecía entre dos era que pasaba un ángel que les robaba la voz. Y hubo tal silencio el día
Es día de frío y llegas a casa. Vienes de la tarde cansada de un j… Los muebles, tu perro y millones d… están como siempre esperando tu vu… en la que presientes que nada ha c…
Vivo en un país libre cual solamen… en esta tierra, en este instante, y soy feliz por que soy gigante. Amo a una mujer clara que amo y me… O casi nada, que no es lo mismo pe…
Llueve otra vez detrás de mis fron… Entre oreja y oreja nubes bajas, oscuras como cajas, se disfrazan de fieros animales. Una mujer he visto cuatro veces
No hacen falta alas Para hacer un sueño Basta con las manos Basta con el pecho Basta con las piernas
Le he preguntado a mi sombra a ver como ando para reírme, mientras el llanto, con voz de tem… rompe en la sala regando el tiempo… Mi sombra dice que reírse
Dejé pasar unas horas por si se huía tu sueño. Durmiendo la veladora tu tiempo se entró en mi tiempo y, en fin, la guitarra sola