(1979)
#Cantautores #EscritoresCubanos #TrovaCubana
Tocando fondo nací un buen día, tocando fondo ando todavía. Menos hermoso
Si me dijeran pide un deseo preferiría un rabo de nube, un torbellino en el suelo y una gran ira que sube. Un barredor de tristezas,
Como la muerte anda en secreto y no se sabe qué mañana, yo voy a hacer mi testamento, a repartir lo que me falta —pues lo que tuve ya está hecho,
Tú, sentada en una silla; yo, de pie con expresión de lord. Tú,
Si me levanto temprano, fresco y curado, claro y feliz, y te digo: «voy al bosque para aliviarme de ti», sabe que dentro tengo un tesoro
Hay hombres que luchan un día y so… Hay otros que luchan un año y son… Hay quienes luchan muchos años y s… Pero hay los que luchan toda la vi… Esos son los imprescindibles.
Le he preguntado a mi sombra a ver como ando para reírme, mientras el llanto, con voz de tem… rompe en la sala regando el tiempo… Mi sombra dice que reírse
En el borde del camino hay una sil… la rapiña merodea aquel lugar. La casaca del amigo esta tendida, el amigo no se sienta a descansar. Sus zapatos, de gastados, son espe…
Compañeros poetas, tomando en cuen… quisiera preguntar—me urge—, ¿qué tipo de adjetivos se deben us… el poema de un barco sin que se ha… fuera de la vanguardia o evidente…
Me veo claramente mascando un peda… me veo claramente muy sucio y feli… Me veo descubriendo descalzo un bu… me veo claramente lejano de aquí. Me veo claramente haciendo pregunt…
Cuentan que cuando un silencio aparecía entre dos era que pasaba un ángel que les robaba la voz. Y hubo tal silencio el día
Nuestro tema está cantado con aren… espuma y aves del amanecer. Nuestro tema está listo para ser brisa de las alas migratorias. Nuestro tema es para ver llover.
Disfruté tanto tanto cada parte y gocé tanto tanto cada todo que me duele algo menos cuando par… porque aquí te me quedas de algún… Ojalá nunca sepas cuánto amaba
Cuando Pedro salió a su ventana no sabía —mi amor, no sabía— que la luz de esa clara mañana era luz de su último día. Y las causas lo fueron cercando
Dejé pasar unas horas por si se huía tu sueño. Durmiendo la veladora tu tiempo se entró en mi tiempo y, en fin, la guitarra sola