Los días pasan sale el sol a veces llueve se te pierde algo hace frío
Te veo te siento te escribo te quiero. Avanzas
Hermosa preciosa te invoco en este poema a que te cruces en alguna esquina de mi vida
Recoge mis piernas y deja mi alma en el suelo. Camina junto con mi cuerpo déjame los pensamientos. Allá afuera,
El pajarito se ha declarado ¡I N O C E N T E! él dice: ¡yo no soy un humano! por ende...
Es cómodo el silencio que tejes en el tiempo a la espera del afecto más lejano instancia lenta de tus labios despistando al efímero instante
Entreabierta eres precisa. Deslizándome Como un relámpago
Pobres ventanas ninguna quiere tener frenillos.
Somos dos esclavos; de la eternidad del anhelo del susurro del secreto.
Las ratas que rondan en el tejado se aburrieron de ver follar a los gatos calientes
Fue la palabra que definió todo. Tus ojos van de mano en mano de boca en boca.
El maldito cambio irremediable Frente a los pensamientos La amargura de los días y días El sonoro instante del recuerdo La vida sin rumbo frente al cielo
No te preocupes de la hora, preocúpate del a h o r a.
Quiero tirarme un piquero en tu vagina navegar por tus entrañas e ir a tu estómago y comerme las mariposas
Si pudiese viajar en el tiempo pensaría tres veces a donde quiero ir. De seguro, mi ansiedad me confundiría