Todos los días tengo un suicidio me voy matando en cada mujer que f… en pedazos pequeños... para que nadie note mi ausencia por cada otra que muere
Era un viaje extraño, mis pupilas dilatadas observaban cada gota: de sangre y de agua. Y caminé por dentro,
No moriré tanto, para secar los ca… se han de madurar los frutos de m… y caerán de tus ojos, las horas no… y quedaremos ciegos, de tanta dist… Necesito sentir el néctar de tu a…
Habrá un día que aparezca, con un mínimo de fe y certeza, cuando en las húmedas manos desaparezca la esperanza se alargará el brillo de la luna y
Él se anida en mis noches, al final de los ojos cerrados me encuentro a su lado, y borro los días más tristes dibujo luciérnagas en el aire,
En cuestiones de amor, he sido ingenua. Los raspones de rodillas sanan, siempre. Desde el sillón, la escalera
Antes de hablar mal de mí, hombre,…
De la piedra, no saldrá el sonido… ni de los bosques, un suspiro. Es necesario despertar a medio sue… y observar la necesidad del fuego, para ser luz o cenizas.
Abrazo los árboles amputados para reescribir tu nombre en un bosque simulado de verde, piso la hojarasca salvaje encuentro un beso despidiéndose
Los árboles, parecen muertos sin voz, ni tiempo ni calma. se mueven al compás del viento, son las tumbas de los pájaros sus ramas vacías, dibujan verdes
He perdido mis imágenes paulatinam… este mundo, no lo conozco las historias ya contadas, las leo… tomó un café por las noches para p… de la que he sido, tampoco sé quie…
Es la hora del frío, tejo caricias de hilo fino y caliento mis manos, para que sean bufanda en tu cuello.
Siempre sospeché que tu beso era incierto, que detrás de tus palabras húmedas y en movimiento, sólo existía la nada. Una noche, tus ojos parecían alimentarse de los rayos de luna que ca...
Tengo un poco de soledad, que Dios viste de horizonte, y adormece con milagros, el espíritu preciso, del poema. María Cayo.
Pregunto a tu cuerpo, la palabra insinuante, y busco con la lengua el sinónimo preciso que extraiga los a b c