El vigía posaba su mirada en lo ma… Y fue él, quien precisamente dijo:… Para que están las leyes sino para… "Oh los leguleyos, expresó el Obs… Si los responsables de que se cump…

Puerto de Buenos Aires, fuiste entrada al contrabando; por tus entrañas pasaron, melodías de arrabal. El estaño y el percal,

Disculpe al que molesto, pero creer exagerado, considerarse profeta, porque en su tierra lo ignoran. Sobre todo cuando en ella,

A sabiendas la ignorancia asintió con la cabeza de una manera encubierta, y sin que nadie supiera, “ el que mira hacia otro lado,

Nunca serás mía ni de nadie, por eso te llamas poesía. Recorres los caminos del pasado, vienes del infierno o dando vida, vagas sin distancia ni consuelo,

Que es lo que fascina del imbricado y complejo devenir un alma torturada, plagada de tale… o la acaramelada existencia de un mediático exitoso.

Bendito sea el Perdón, de los pe… porque si existieras, lograrías; cicatrizar las heridas innobles arrancar el rencor que paraliza, evitar los despertares dolorosos,

Los farsantes consideran inminente el desenlace. Los diarios insisten con mensajes de temor. La opinión pública, aprueba

Nota del Autor: este poema esta inspirado en la obra del Gran Maestro, Escritor y Poeta Argentino Leopoldo Marechal quién fue discriminado y perseguido durante la dictadura Cívico Milit...

Dado los tiempos por los cuales at… “Que existe una gran diferencia en…

Intenté, cerrar la puerta de un vi… a un cactus le puse Puerco Espín, al viento traté de enderezarlo, y al espíritu travieso, lo seguí. Había descubierto sin saberlo

El azul se hizo dueño de la calma, el verde se proclamó Rey de la esp… el dorado de los años buenos, el cielo del celeste puro, y la pa… su alcoba y su fachada.

Si conocí la inmensidad y hallé al silencio. Fue porque pude sentir sin ver pude alcanzar

Los árboles soñaban con su ausenci… y en el crepúsculo las hojas murmu… “No hay pena que dure mucho tiempo… ni tristeza que no encuentre una m… Y las flores novias del colorido i…

Es diferente empaparse que gozar, el ver llover. inolvidable placer, momentos que poco abundan, ahí, las gotas se juntan