Todas íbamos a ser reinas, de cuatro reinos sobre el mar: Rosalía con Efigenia y Lucila con Soledad. En el valle de Elqui, ceñido
Para mí tu recuerdo es hoy como la… del fantasma a quien dimos el nomb… Yo fui bueno contigo, tu desdén no… pues no me debes nada, ni te repro… Yo fui bueno contigo como una flor…
¡Ah mundo! La negra Juana, ¡la mano que le pasó! Se le murió su negrito, sí, señor. —Ay, compadrito del alma,
Todo es muy simple mucho más simple y sin embargo aún así hay momentos en que es demasiado para mí en que no entiendo
Cebolla luminosa redoma, pétalo a pétalo se formó tu hermosura, escamas de cristal te acrecentaron
3. Desdichado el pobre en espíritu… 4. Desdichado el que llora, porque… 5. Dichosos los que saben que el s… 6. No basta ser el último para ser… 7. Feliz el que no insiste en tene…
El bastón, las monedas, el llavero… la dócil cerradura, las tardías notas que no leerán los pocos días que me quedan, los naipes y el tab… un libro y en sus páginas la ajada
Qué vanidad imaginar que puedo darte todo, el amor y la… itinerarios, música, juguetes. Es cierto que es así: todo lo mío te lo doy, es cierto,
Si (como afirma el griego en el C… el nombre es arquetipo de la cosa en las letras de “rosa” está la ro… y todo el Nilo en la palabra “Nil… Y, hecho de consonantes y vocales,
—Un portal. —No lo tenemos. —Por una noche. —¿Quién eres? —La Virgen.
El primer puente de Constitución… Fragor de trenes que tejían laberi… Humo y silbatos escalaban la noche… Que de golpe fue el juicio Univer… Y desde el centro de mi ser, una v…
No habrá nunca una puerta. Estás… y el alcázar abarca el universo y no tiene ni anverso ni reverso ni externo muro ni secreto centro. No esperes que el rigor de tu cami…
Crecen los muros de su cárcel, como en un sueño atroz. La hermosa máscara ha cambiado, pero como siempre es la única. ¿De qué me servirán mis talismanes: el ejercicio de las letras, la...
Es hielo abrasador, es fuego helad… es herida que duele y no se siente… es un soñado bien, un mal presente… es un breve descanso muy cansado. Es un descuido que nos da cuidado,
Cuando se tiene un hijo, se tiene al hijo de la casa y al d… se tiene al que cabalga en el cuad… y al del coche que empuja la insti… y al niño gringo que carga la crio…
Zeus no podría desatar las redes de piedra que me cercan. He olvida… los hombres que antes fui; sigo el… camino de monótonas paredes que es mi destino. Rectas galerías
Del nicho helado en que los hombre… te bajaré a la tierra humilde y so… Que he de dormirme en ella los hom… y que hemos de soñar sobre la mism… Te acostaré en la tierra soleada c…
Hay tardes en las que uno desearía embarcarse y partir sin rumbo cier… y, silenciosamente, de algún puert… irse alejando mientras muere el dí… Emprender una larga travesía
En su grave rincón, los jugadores rigen las lentas piezas. El tabler… los demora hasta el alba en su sev… ámbito en que se odian dos colores… Adentro irradian mágicos rigores
Educar es lo mismo que poner motor a una barca… hay que medir, pesar, equilibrar… …y poner todo en marcha. Para eso, uno tiene que llevar en…
En la casa de las pinturas Comienza a cantar, Ensaya el canto, Derrama flores, Alegra el canto.
Ni el pormenor simbólico de reemplazar un tres por un dos ni esa metáfora baldía que convoca un lapso que muere y o… ni el cumplimiento de un proceso a…
Hoy te saludo brutalmente: con un golpe de tos o una patada. ¿Dónde te metes, a dónde huyes con tu caja loca
Gracias quiero dar al divino Laberinto de los efectos y de las… Por la diversidad de las criaturas Que forman este singular universo, Por la razón, que no cesará de soñ…
Es flaca sobre manera toda humana previsión, pues en más de una ocasión sale lo que no se espera. Salió al campo una mañana
Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos. Sólo los espejos de azabache de sus ojos son duros cual dos escarabajos de cr...
Todo lo que de vos quisiera es tan poco en el fondo porque en el fondo es todo, como un perro que pasa, una colina… esas cosas de nada, cotidianas,
Para mi corazón basta tu pecho, para tu libertad bastan mis alas. Desde mi boca llegará hasta el cie… lo que estaba dormido sobre tu alm… Es en ti la ilusión de cada día.
A caballo en el quicio del mundo un soñador jugaba al sí y al no Las lluvias de colores emigraban al país de los amores Bandadas de flores
El Cid se dirige contra tierras d… Aquí se empieza el poema de Mío C… Ya ha poblado Mío Cid aquel puert… se aleja de Zaragoza y de las tier… atrás se ha dejado Huesca y el cam…