Inmóvil en la luz, pero danzante, tu movimiento a la quietud que crí… en la cima del vértigo se alía deteniendo, no al vuelo, sí al ins… Luz que no se derrama, ya diamante…

Al natural, en cápsulas, abiertas o cerradas, ya desalmadas, Elvira y doña Sol; en cada cuna Eros y leche: digestión pacífica

Pulsas, palpas el cuerpo de la noc… verano que te bañas en los ríos, soplo en el que se ahogan las estr… aliento de una boca, de unos labios de tierra.

Soy hombre: duro poco y es enorme la noche. Pero miro hacia arriba: las estrellas escriben. Sin entender comprendo:

III A la orilla, de mí ya desprendido, toco la destrucción que en mí se a… palpo ceniza y nada, lo que llueve el cielo en su caer oscurecido.

NARANJA Pequeño sol quieto sobre la mesa, fijo mediodía. Algo le falta:

ELLA cierra los ojos y en su ade… está desnuda y niña al pie del árb… Reposan a su sombra el tigre, el t… Tres corderos de bruma le da al ti… tres palomas al toro, sangre y plu…

Se mece aérea se desliza entre ramas troncos postes revolotea perezosa

El sol entre los follajes y el viento por todas partes llama vegetal te esculpen, si verde bajo los oros entre verdores dorada.

Cielos de fin de mundo. Son las c… Sombras blancas: ¿son voces o son… Contra mi sien, latidos de motores… Tiempo de luz: memoria, torre hend… pausa vacía entre dos claridades.

A las diez de la noche en el Café… salvo nosotros tres no había nadie Se oía afuera el paso húmedo del o… pasos de ciego gigante

Así como del fondo de la música brota una nota que mientras vibra crece y se adel… hasta que en otra música enmudece, brota del fondo del silencio

Deja que una vez más te nombre, ti… Mi tacto se prolonga en el tuyo sediento, largo, vibrante río que no termina nunca,

A Silvina Ocampo ¿Quién canta en las orillas del pa… Inclinado, de pechos sobre el río de imágenes, me veo, lento y solo, de mí mismo alejarme: letras puras…