Sí, más verdad, Objeto de mi gana. Jamás, jamás engaños escogidos. ¿Yo escojo? Yo recojo La verdad impaciente,

Cada vez que me despierto mi boca vuelve a tu nombre como el marino a su puerto. ~ Este volver a empezar

Dije: Todo ya pleno. Un álamo vibró. Las hojas plateadas Sonaron con amor. Los verdes eran grises,

La caricia adormece, y a una región conduce más cercana a la tierra, a su silencio y sueño, bien tendidos, dichosos.

Pelados, tristemente naturales, en inmovilidad de largas crines desgarbadas, sumisos a confines abalanzados por los herbazales, unos caballos hay. No dan señales

Somos los hombres intranquilos En sociedad. Ganamos, gozamos, volamos. ¡Qué malestar! El mañana asoma entre nubes

El arroyo Se rinde a su destino: lo más bell… Trasparencia. Por el arroyo claro va la hermosur… No, no hay ninfas.

Permanece el trote aquí, Entre su arranque y mi mano. Bien ceñida queda así Su intención de ser lejano. Porque voy en un corcel

No más desgana displicente. Que el maravilloso deseo Te impulse por la gran pendiente Donde triunfarás como Anteo No hay contacto que desaliente.

Albor. El horizonte entreabre sus pestañas, y empieza a ver. ¿Qué? Nombres. Están sobre la pátina de las cosas. La rosa

Un recuerdo—pasado deleitoso— me ataca y se apodera tanto de mí que interna primavera me somete a su acoso. Aquel amor aun vibra

Muros. ........ Jardín bien gozado Por los pocos. .........¡No hay pecado! Perfección ya natural.

Por el aire de estío La gaviota ascendiendo Domina la extensión, el mar, el mu… Bajo azul, bajo nubes En vellones muy blancos,

Conchas crujientes, conchas, conchas del Paraíso... Las descubren, perdidas para los dioses, indios. Entre las arenas los llaman

Respiro, Y el aire en mis pulmones Ya es saber, ya es amor, ya es ale… Alegría entrañada Que no se me revela